Durante más de cinco décadas, Aníbal Reyna fue una de las figuras más reconocidas del mundo de la actuación en Chile. Obras de teatro, películas, telenovelas y series formaron parte de su nutrido currículum, el cual se ha cerrado hoy a la edad de 78 años.
Es que según confirmó esta mañana de sábado 16 de julio Sidarte (organismo que él llegó a presidir), el actor murió, enlutando así al mundo de las artes en nuestro país. Reyna padecía de diabetes desde hace más de una década.
Aníbal era un actor egresado de la Pontificia Universidad Católica de Chile y fue premiado en diversas ocasiones por su labor teatral, tanto como actor y director independiente en nuestro país, así como también fuera de nuestras fronteras, en naciones como Perú, España y Alemania, entre otras. Todo esto con compañías chilenas.
En el cine, destacó en cintas como “El libro de Job”, “La frontera”, “Negocio redondo”, “Antonia” “El viaje de Emilio”, “La pasión de Michelangelo” y “El tío”, por nombrar sólo algunas.
En tanto, en TV su cara fue muy conocida por los fanáticos de teleseries, participando en un sinnúmero de producciones por el estilo. En los años ochenta y principios de los noventa fue rostro estable del área dramática de Canal 13, estando principalmente en las telenovelas del fallecido dramaturgo y guionista Sergio Vodanovic. De hecho, estuvo en todas las producciones que él escribió para la casa televisiva: “Los títeres” (1984), “Secreto de familia” (1986), “La intrusa” (1989), “Villa Nápoli” (1991) y “Doble juego” (1993).
Uno de sus roles más recordados en teleseries fue el de “Elías Godán” en “Los títeres”, el padre de la malvada “Adriana Godán”, interpretada por Gloria Münchmeyer. En ese sentido es que el actor fue parte de una de las escenas más llamativas en la historia de las telenovelas locales, cuando “Adriana” enloquece y peina muñecas al interior de una piscina. Ahí su padre, en manos de Reyna, la observaba atentamente.
Otras telenovelas del currículum de Aníbal fueron en Mega, como “Rossabella” (1997), “A todo dar” (1998) y “Algo está cambiando” (1999), para más tarde volver al 13, en donde en 2004 fue un italiano en “Tentación” y en 2006 tuvo un rol clave en el primer capítulo de “Charly tango”. Ahí su personaje moría y su deceso gatillaba todo el devenir de la historia.
La última intervención del actor en una telenovela fue en 2014, en “Vuelve temprano”, en la que interpretó a un sacerdote en lo que fue una participación especial en la exitosa producción dramática de TVN.
Hoy sus familiares, amigos, colegas y autoridades del mundo de la cultura lamentan su partida y han mostrado su dolor en redes sociales.
Según lo comunicado por el Sindicato de Actores de Chile, sus restos serán cremados en la ciudad de Arica, y el día viernes llegará a Santiago junto a su familia, para ser finalmente despedido en el cementerio Metropolitano.
