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Ariana Grande regresó el martes a Estados Unidos, un día después de que un suicida con bomba mató a 22 personas en un concierto de la cantante en Manchester, informó la revista People, en medio de dudas sobre si continuará con su gira por Europa.
La artista, de 23 años, fue fotografiada luego de su llegada al aeropuerto de Boca Raton (Florida), donde fue recibida por miembros de su familia y su novio Mac Miller. Esta es una de las imágenes exclusivas del Daily Mail, donde se le ve conmovida por la tragedia.
La estrella de la música pop no apareció en público desde la explosión en el repleto Manchester Arena, ocurrida tras el final de su concierto en la ciudad inglesa. Algunas de las 22 personas que murieron en el ataque eran adolescentes o niñas pequeñas. Aparentemente, Grande resultó ilesa.
La policía británica ha identificado al supuesto autor de la masacre como Salman Abedi, de 22 años, quien nació en Manchester y es hijo de una pareja de origen libio. Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad de lo que llamó una venganza contra los "cruzados", pero parece haber contradicciones en su relato de la operación.
En su único comunicación hasta el momento, Grande publicó en Twitter unas cinco horas después del ataque que se sentía "destrozada" como consecuencia del ataque. "Desde el fondo de mi corazón, lo siento mucho, no tengo palabras", dijo en el mensaje.
Grande se presentó en Manchester en el marco de una gira por Europa para promover su tercer álbum, "Dangerous Woman", que incluye conciertos en Londres, Bélgica, Polonia, Alemania y Suiza en las próximas semanas.
A pesar de las especulaciones de que cancelaría el resto de la gira, hasta la tarde del martes no se había hecho un anuncio formal. El agente de Grande, Scooter Braun, no respondió a las solicitudes de comentarios de Reuters.
