Amado y odiado: la historia del icónico bikini de esclava de Leia
Amado y odiado: la historia del icónico bikini de esclava de Leia
El bikini de esclava que Carrie Fisher usó en El Regreso del Jedi la convirtió en un sex symbol para sus fans y toda una generación.
El escueto traje dorado fue inolvidable para ellos y también para la actriz, porque la crítica por usar ese atuendo considerado sexista la persiguió por siempre. Ante esos ojos era un insulto para el personaje.
En la tercera cinta de Star Wars, el personaje de Carrie Fisher intenta rescatar a Han Solo (Harrison Ford) de la prisión de Jabba, pero falla en su plan y es capturada. La déspota criatura obliga a Leia ser su esclava y a vestir el traje dorado. Cuando Luke Skywalker llega, ahora un Jedi de gran habilidad y poder, ella aprovecha el caos y estrangula a Jabba con la misma cadena con que la tenía prisionera.
¿De quién fue la idea del usarlo? Hay dos versiones. Una apunta a que Carrie Fisher fue obligada, la otra dice que la misma actriz lo sugirió a George Lucas, porque su personaje tenía un guardarropa de solo dos trajes.
El diseño
El bikini dorado fue realizado por la diseñadora de vestuario Aggie Guerard Rodgers, cuya carrera en Hollywood comenzó con la película American Graffiti en 1975.
Según dice, Lucas apenas le dio instrucciones generales sobre la escena en el palacio de Jabba, Pero claramente quería algo “especial”.
"Sus ojos empezaron a brillar cuando hablamos de ello", dijo Rodgers a la revista Wired.
El departamento de vestuario hizo un molde del torso de Fisher para que ajustara a la perfección, y se hicieron varias versiones del traje para que se viera bien en diferentes tomas. "Una era una pieza de metal duro que (Fisher) llevaba cuando no hacía ninguna acrobacia, y otra una pieza de goma que formamos para que se sintiera cómoda en escenas de acción. Las piezas estaban forrada con cuero para que no se irritara su cuerpo", describió.
Podría haber sido un disfraz completamente diferente. "Yo quería 20 metros de tela flotando en escena, pero no podríamos hacer que funcionara", dijo Rodgers sobre su concepto original.
El traje fue inspirado por la obra del artista Frank Frazetta, quien realmente amaba la forma (femenina y el hecho de que el traje de Leia sea un traje femenino y sensual, creo que es fantástico".
En una entrevista de 2015, tres años después de que Disney comprara la franquicia, el traje volvió a estar en el ojo de la crítica. Todo partió por el reclamo de Fred Hill, un padre que vio una figura de juguete de la “Esclava Leia” vistiendo el bikini dorado en una tienda.
Disney se incomoda
El juguete, “apto para niños mayores de 4 años”, causó curiosidad s sus hijas que le preguntaron por qué esa muñeca tenía una cadena alrededor del cuello. “No tenía ninguna respuesta, me quedé impresionado mirando”, dijo a los medios.
La controversia hizo que Disney retirara del mercado la figura.
En 2015, durante una entrevistada, The Wall Street Journal le preguntó a Carrie Fisher por el bikini dorado y específicamente por su opinión sobre la prohibición de la muñeca.
La actriz respondió: “A ese padre que pregunta qué decirle a sus hijas de por qué Leia está en ese traje… Dígales que una babosa gigante me capturó y me obligó a usar ese traje estúpido, luego la maté porque no me gustaba y luego me lo quité, en privado”.
Tiempo después, en una entrevista mutua con Daisy Ridley, quien encarnó a Rey en la séptima parte de la saga, Fisher – en tono relajado y casual para la entrevista- le dijo como consejo: "No seas esclava como yo (…) Sigue luchando contra ese traje de esclava”.