Starlink, un proyecto de la empresa espacial SpaceX del multimillonario sudafricano Elon Musk, ha anunciado que probará su red de internet satelital en dos países latinoamericanos durante este año: Chile, en septiembre, y México, en octubre.
Según el acuerdo anunciado por el gobierno chileno, la compañía de Musk busca proporcionar internet satelital a comunidades rurales y/o aisladas con problemas de conectividad digital, mediante un permiso especial para que la empresa realice sus operaciones sin un fin comercial.
Los lugares elegidos para estas pruebas fueron Caleta Sierra, una pequeña localidad ubicada a 400 km al norte de Santiago donde viven 170 personas, y Sotomó, un poblado con un centenar de habitantes ubicados a 950 km al sur de la capital, donde solo se puede acceder por vía fluvial.
"Starlink fue diseñado para comunidades remotas como las de Caleta Sierra y Sotomó", dijo Gwynne Shotwell, presidenta y directora de operaciones de SpaceX, en un comunicado.
Starlink comprometió un potencial de descarga que oscila entre 50 a 150 Mb/s, con una latencia (tiempo que se tarda en enviar datos de un punto al siguiente) de 20 a 40 milisegundos.
"Una oferta suficiente para actividades relacionadas con teletrabajo, entretenimiento y educación" para ambas poblaciones, informó la nota.
Chile se convertirá en el primer país de la región en contar con el internet satelital de Starlink
Para realizar la conexión, Starlink entregó kits satelitales que permitirán servicios gratuitos de internet durante un año. Transcurrido este tiempo, se acordó que el costo será absorbido por los municipios.
México tendrá servicio de pago
En el caso de México, el servicio de internet de Starlink, que cuenta con los derechos de emisión y recepción por 10 años, será pagado. A partir del 28 de octubre, los mexicanos podrán usar la señal a un precio de 99 dólares (1.960 pesos mexicanos).
Asimismo, y aunque el precio del servicio ofrecido será mayor que el de otras compañías mexicanas, ofrecerá una velocidad de navegación de hasta 1 Gbps, enfocado también en comunidades rurales y con poca conectividad.
El sudafricano Elon Musk había dicho el miércoles pasado en Barcelona que invertirá hasta 30.000 millones de dólares en el proyecto Starlink, que ya desplegó más de 1.500 satélites y cuenta, en una docena de países, con más de 69.000 usuarios activos.