Un joven australiano de nombre Finn Stannard realizó un emocionante discurso de graduación donde habló de lo que es ser gay en un establecimiento católico y conservador.
El joven asistía a un colegio llamado St. Ignatius, uno de los más elitistas de Sidney, y sintió que tenía que compartir su experiencia para que sus compañeros pudieran empatizar con quienes se sentían diferentes por ser homosexuales.
"Presentarte al mundo da un poco de miedo porque, ¿qué pasa si al mundo no le gustas? Me armé de valor y decidí que era el momento de contarle la verdad a alguien. No fue fácil, pero le conté a mi madre que creía que era gay", dijo Finn frente a todos sus compañeros.
Y agregó: "Vivir con una careta es algo que nadie tendría que sufrir, así que el mensaje que les mando desde mi cabeza es: 'Apóyate de gente que te deje vivir como eres de verdad y nunca tengas miedo de pedir ayuda. Busca tu propia identidad y siéntete cómodo con quien eres'".
El discurso fue aclamado por todos sus compañeros, quienes después de grabarlo lo subieron a las redes sociales. Finn causó tanto revuelo que incluso un importante medio australiano SBS decidió entrevistarlo a él y a su madre.
Finn le contó al medio SBS que cuando realizó el discurso sintió una "energía pasando a través de él" y que en ese momento sintió que por primera vez estaba orgulloso de quien era.
Por otro lado, su madre dijo estar emocionada e impactada por el buen recibimiento de sus compañeros.
"Fue asombroso. El hecho de que Finn fuera apoyado, el hecho de que su mensaje fuera escuchado... Yo estaba llorando. Estaba tan orgullosa".
Después de dar el discurso y sentirse tan apoyado, Finn decidió asistir a su baile de graduación con su novio Tom.