Un viejo anhelo de los fans de la banda californiana Red Hot Chili Peppers se cumplió la semana pasada, cuando el cuarteto interpretó en vivo la emotiva canción "Dosed" por primera vez desde 2002, año en que fue incluida en el disco "By the way".
Con el pasar de los días, se conoció que la interpretación en dos fechas de la gira del grupo por Canadá se debió a una triste razón. Fue Maggie, una fan desahuciada, quien solicitó el debut en vivo de la canción como último deseo de vida.
En medio de la algarabía de los fans que registraron el momento y lo subieron a Youtube, apareció el comentario de Steven Schmidt (padre de la joven) confirmando el deseo de su hija y agradeciendo el gesto de la banda liderada por Anthony Kiedis.
"Puedo decirles que estos hombres tienen bellas almas. Han ayudado a nuestra familia en tiempos de crisis. Ellos no pueden tocr esta canción debido a la cantidad de pistas de guitarra que tienen. Pero Josh (el guitarrista) prometió a nuestra hija, Maggie, que lo haría por ella. Ella les había dicho en febrero, en el Madison Square Garden, que su álbum favorito era "By the Way" y realmente le gustó "Dosed". (Steven Schmidt)
La muerte de Maggie se produjo finalmente el 1 de junio, días después de que pudiera enterarse de que su banda favorita tocó la canción que ella quería. Red Hot Chili Peppers homenajeó a la muchacha de sólo 17 años con publicaciones en Instagram.
"Maggie, siempre serás parte de nuestra familia. Mandamos todo nuestro amor a tu familia y amigos, descansa en paz dulce alma".
"Dosed" es la cuarta pista del disco "By the Way" (2002) y la letra tiene alusiones a las adicciones pasadas de Kiedis. Su versión original dura poco más de cinco minutos y cuenta con cuatro guitarras sonando en paralelo, para interpretarla en vivo, los Red Hot Chili Peppers utilizaron la compañía de un piano e invitaron al escenario a Zack Irons, hijo de un antiguo baterista del grupo.