Por largos años los científicos especializados en la historia del antiguo Egipto buscaron sin éxito la explicación para las inusuales circunstancias de una momia identificada como "Hombre desconocido E", que además de tener una conservación distinta al resto, aparecía con su boca abierta.
Luego de análisis de ADN, las nuevas investigaciones plantean que el cuerpo corresponde al príncipe Pentaur, famoso por haber participado en una conspiración para matar al faraón Ramsés III.
La evidencia histórica dice que Pentaur fue condenado a la horca luego de ser descubierto. Eso explicaría la boca abierta y las marcas que tiene en su tórax.
"La momia que grita" tenía características distintivas respecto a las otras que se conservaban junto a ella, ya que en lugar de haber cumplido con el riguroso proceso de momificación, el cadáver fue dejado junto al resto de las momias reales para que terminara de secarse y envuelto en cuero de oveja. En el antiguo egipto, el cuero de oveja era considerado impuro.
La Conspiración contra Ramsés III, en tanto, fue revelada en un viejo papiro. Allí no se especifica si tuvo éxito, pero aparece una críptica frase traducida como "la barca real fu volcada".