Edo Caroe, Alejandro Barros y Tomás Leiva en Socios de la parrilla: los humoristas meditaron sobre la amistad que los une y la relación con el podcast 'Tomás va a morir'
Los tres humoristas, Edo Caroe, Alejandro Barros y Tomás Leiva, amigos desde hace más de 20 años, son los protagonistas del exitoso podcast “Tomás va a morir”, en donde comparten sus anécdotas y experiencias en conversaciones cargadas de humor y mucha risa.
Caroe, Barros y Leiva estuvieron por primera vez juntos en una entrevista en televisión donde revelaron su amistad, sus inicios en el humor y cómo llegaron a crear el podcast, que se transmite por YouTube y que ya va en su sexta temporada.
Los tres amigos contaron cómo debido a un infarto que sufrió Tomás Leiva, que puso en riesgo su salud y su vida, decidieron juntarse y en estas reuniones se forjó la idea de crear este podcast. Tomás comentó, “igual es una historia bonita porque… no teníamos micrófono, teníamos sólo una tascam y los micrófonos me los prestó Felipe Avello, que eran los micrófonos que usaban ellos en ‘Tierra 2’ (el podcast de Ruminot junto a Avello), o sea, ’Tomás va a morir’ existe gracias a la bondad de Felipe Avello”.
Y agregó, “no teníamos muy claro qué íbamos a hacer, simplemente queríamos hablar, pero nos dimos cuenta que ninguno de los dos (Caroe y Leiva) tenía contenido serio, entonces ahí entró el señor archivista Barros que venía a poner la cuota de seriedad, él entregaba los datos importantes”.
Por su parte, Ruminot explicó el origen del recordado podcast “Tierra 2”: “Con Avello teníamos un podcast, que eran dos hombres que escapaban del planeta Tierra porque el planeta se había vuelto muy mentiroso y asqueroso y huíamos a buscar la Tierra 2, por eso se llamaba así. En el camino conocíamos a Jueves, un joven que volaba por el espacio en un cajón de tomates”.
Más adelante, Leiva desclasificó cómo teniendo un trabajo estable en un canal de noticias, se decidió a dejarlo para realizar este podcast con sus amigos. Para esto tuvo que convencer a su esposa y a su hijo, “les tuve que contar que iba dejar de trabajar para hacer este podcast. En esa época tenía un trabajo formal en CNN, era post productor del área de noticias en posiciones digitales y había logrado tener un programa, un lapsus de 10 minutos para grabar una cápsula”. Les tuve que decir ‘mira, voy a apostar todo por este podcast’”.
En tanto, Edo Caroe recordó que estudió tres años Derecho, y en ese último año descubrió la magia y la comedia, “estaba todo el tiempo pensando en actuar. Estaba en clases mientras escribía chistes y mis rutinas de magia, pero ya mi cabeza no estaba ahí y tuve que tomar una decisión, decidí dejar la universidad y todas mis cartas las aposté al escenario. Fueron años difíciles, pero se logró”.
En la sección “Culpable soy yo”, los invitados revelaron sus grandes secretos, como, por ejemplo, Alejandro Barros practica buceo de apnea y en la mesa de “Socios” realizó el ejercicio, manteniéndose dos minutos con la cabeza sumergida en agua. Así también, Caroe reveló que jugó como arquero en Santos, equipo de Temuco donde comenzó su carrera profesional el famoso futbolista Marcelo Salas.
Posteriormente, los tres comediantes relataron cómo el podcast “Tomás va a morir” los llevó a realizar un viaje a Torres del Paine y hacer un documental desde este lugar. Alejandro lo recordó así: “la idea nació por culpa mía, quería poner a prueba la amistad… Hicimos el recorrido conocido como la W de Torres del Paine, la hicimos completa. La idea fue registrar con cámaras todo el viaje y después en base a eso se hizo un mini docurreality, una historia que está muy bonita y muy bien editada de la aventura que tuvimos desde el día 1 hasta el final”.
“Son cuatro capítulos bastante buenos, y lo lindo que tiene como producción es que si bien tiene humor con momentos muy chistosos, es un relato bonito de ver. Tiene mucho drama y es muy diferente a todo lo otro que hemos hecho y por eso a mí me gusta tanto”, manifestó Tomás Leiva.
Luego, los humoristas meditaron sobre la amistad que los une y la relación con el podcast, y concluyeron que “’Tomás va a morir’ es un proyecto que está anclado a nosotros tres, creo que cualquiera que falte dentro del podcast se notaría. Tendría que tener otro nombre, por lo que si uno falta, el proyecto se terminaría como lo conocemos”, puntualizó Leiva.
Además, Edo Caroe enfatizó que “este trabajo está muy anclado emocionalmente en la amistad que forjamos, que no fue algo fácil, son 20 años, con muchas cosas entre medio y con tres personalidades que son muy diferentes”.
Ya en el momento del bajativo, “Socios de la parrilla” se traslada al living de la casa, lugar donde Saavedra les pregunta por el éxito que ha tenido Edo Caroe y cómo se suman a esto Leiva y Barros. Tomás lo describe así, “los dos nos podemos sumar a ese trayecto. Yo trabajé mucho con Edo desde atrás, la época donde Edo hacía shows infantiles en casas y en patios… Y pasar de ese patio a ver dos Movistar llenos ha sido muy bonito”.
Podcast de Edo Caroe logra acuerdo exclusivo con Spotify
“En 20 años de amistad hemos visto, junto a Edo, y él también nos ha visto a nosotros, momentos muy malos que pasamos juntos. Recuerdo un cumpleaños en que no había nada para comer, solo un paquete de suflés, y nadie más junto a nosotros... estábamos solos”, rememoró Alejandro.
Así, Caroe, desafiando a las grandes productoras, solicitó dos fechas para actuar en el Movistar Arena, algo que no fue fácil. Sin embargo, se convirtió en un fenómeno, con la asistencia de 12 mil personas cada día, vendiéndose las entradas para el primer show en 40 minutos y para la segunda jornada, en 30 minutos. “Venía a coronar un largo trabajo en radio y en televisión, sacando muchos shows y trabajando mucho para ese momento. Fue un gran salto y hay mucho amor detrás de todo esto”.
Edo Caroe y la salud mental
Finalmente, Pancho le preguntó por qué en sus exitosas presentaciones habló tanto sobre salud mental, a lo que Edo reveló que “mi hija y yo estábamos pasando por un mal momento y por eso me metí mucho en el tema de la salud mental, y en el show lo expliqué mucho más. Conversé con la gente en el show y noté que había muchas personas que sólo querían expresar lo que les pasaba, y en los chistes y en el humor encuentran un escape y una forma de decir ‘esto me está haciendo la vida más liviana’”.