La marca de moda italiana Dolce & Gabbana pidió disculpas al público chino tras la polémica suscitada por la publicación de un video considerado racista contra China.
Dicho video llevó a la firma a cancelar un desfile en Shanghái y está afectando a sus ventas en el país asiático. "Lo sentimos muchísimo y queremos pedir disculpas a los chinos en todo el mundo", dicen los modistas en un vídeo de disculpa publicado este viernes en Sina Weibo, el equivalente chino a Twitter.
El pasado martes, Dolce & Gabbana se vio obligada a cancelar un desfile previsto en la ciudad de Shanghái tras la polémica suscitada por unos vídeos publicitarios, en los que aparece una mujer china intentando comer con dificultad comida italiana con palillos, que fueron considerados racistas.
En el video publicado hoy, de un minuto y medio de duración, Stefano Gabbana y Domenico Dolce comparecen sentados frente a la cámara para asegurar que "han reflexionado seriamente" y que están "muy impactados por todo lo ocurrido" y el daño que han causado.
"En nuestra familia nos han enseñado a respetar la diversidad de todas las culturas del mundo, y nos disculpamos si hemos cometido el error de malinterpretar la vuestra", dice Gabanna hablando en italiano en el vídeo, con subtítulos en inglés y en chino.
"Amamos la cultura china, hemos visitado el país muchas veces", apostilla el modisto y añade que "nunca" olvidarán la lección.
"No sucederá más", señala Dolce, que pide perdón "de todo corazón" e implora al público chino que acepte su disculpa.
La crisis no dio hoy muestras de mejorar y sus artículos ya no pueden encontrarse en gigantescas plataformas de compra en línea como las populares Taobao.com, JD.com y Amazon China.
Además, la minorista Lane Crawford afirmó hoy que va a retirar la marca de sus tiendas y plataformas en línea en China después de que los clientes devolviesen artículos de la firma italiana, señaló hoy el diario hongkonés South China Morning Post.
Algunos usuarios de Sina Weibo incluso mostraron hoy imágenes de gente tirando los productos de la firma y a algunos empleados de boutiques retirando artículos.
La cancelación del desfile del martes se produjo después de que varias modelos que iban a participar se negasen, después de saliera a la luz presuntos mensajes privados de Gabbana en los que hablaba con desprecio sobre el país asiático: "un país de mierda", "ignorante" y que "apesta a mafia".
A través de las redes sociales, el diseñador desmintió los mismos y aseguró que le habían robado la identidad de su cuenta y posteriormente la marca lamentó la "desafortunada" cancelación de un evento con el que querían "homenajear a China".
El caso ha indignado fuertemente a la sociedad china y sobre él se ha pronunciado el propio ministerio de Asuntos Exteriores cuyo portavoz Geng Shuang respondió este jueves a una pregunta de los periodistas y dijo que el incidente "no es un asunto diplomático" y que China "no desearía que escalara a esto".