Diplomoceras Maximum es el nombre de una criatura que habitó nuestro planeta hace aproximadamente 68 millones de años: vivía 200 años y tenía forma de "clip".
Este animal, con varias particularidades, habría dominado los oceános cercanos a la Antártida por harto tiempo, informó Nat Geo. Además, habría sido contemporáneo al Tiranosaurio Rex.
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La forma de su concha llamaba la atención: Se asemejaba bastante a los "clips" modernos y pertenecía a un grupo ya extinto de cefalópodos con tentáculos.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Sycaruse de Estados Unidos destacó la extraña morfología de la concha de este molusco, lo que dificultaba conocer su anatomía.
Las investigadoras de la misma institución educativa, Linda Ivany y Emili Artruc, expertas en estudios paleo-climáticos, informaron que la vida de esta criatura pudo haber sido de casi dos siglos.
En los resultados de las investigaciones, se reveló que su caparazón, de aproximadamente un metro y medio de largo, habría tenido docenas de costillas. Además, cada año, el molusco creaba una costilla nueva.
A pesar de que llama la atención la vida útil de este animal (unos 200 años), esto no es difícil de encontrar en moluscos actuales. La que sí es la rareza, es que en el caso del Diplomoceras maximum, que es un cefalópodo, éstos se caracterizan por períodos breves de actividad.
Algunos ejemplos de esto son los calamares gigantes o pulpos, que con algo de suerte pueden llegar a los 5 años de vida. Incluso, el nautilus, que pertenece al mismo grupo, tenía el récord de vida: apenas dos décadas, algo insignificante comparados a los dos siglos del Diplomoceras Maximum.
Ivany sostuvo que la posible razón para que esta criatura pudiera vivir tanto, habría sido un metabolismo lento, lo que le permitía sobrevivir sin comida espacios prolongados de tiempo, sobre todo por el entorno (aguas de la Antártida) donde habría habitado.
