Es una de las reliquias más reverenciadas por los creyentes católicos: una pieza de lino que parece tener impresa la imagen de un hombre con marcas y señales propias de quien ha sido crucificado.
Conocido como el Santo Sudario o el Sudario de Turín - porque es en su catedral donde se preserva-, muchos creen que es la tela que se colocó sobre el cuerpo de Jesucristo cuando fue enterrado.
"Al principio era difícil distinguir algo, luego poco a poco los huesos se hicieron bastante distinguibles, como a través de rayos x, así como las manos cruzadas, los huesos articulados, las muñecas destrozadas como por clavos, un perfil largo, refinado y angular de una cara".
Así fue descrito en 1978, en una de las pocas veces que se ha mostrado al público.
Fecha de fabricación
Durante siglos, el sudario ha sido foco de un intenso debate: ¿cómo y dónde se imprimió sobre la tela la imagen de un hombre crucificado?
El profesor Michael Tite es uno los expertos que más lo ha investigado.
Estuvo a cargo de una investigación que se inició en 1988 para determinar la fecha de fabricación del manto usando datación por radiocarbono.
La propia Iglesia católica había aprobado el estricto protocolo que se iba a seguir en tres laboratorios que ella misma seleccionó.
Tite -en ese entonces responsable del laboratorio de investigación del Museo Británico- llegó en abril de 1988 a Turín para el primer paso del proceso.
Cuántos átomos
"Trajeron el sudario de la capilla detrás de la catedral, donde estaba guardado, y de la que casi nunca se saca", le explicó Tite al programa Witness de la BBC.
Para los creyentes, el sudario tiene un gran significado. |
"No soy creyente, así que para mí no tenía un significado tan importante, pero claro que tenía interés en verlo. Es una imagen extraordinaria", dijo.
Había dos expertos en textil y pudieron examinarlo entero para saber si era parte del original, y no una reparación.
"Se cortó en tres partes, se envolvió en papel de aluminio y se introdujo en un contenedor de metal", indicó Tite.
No creo que sea el sudario de Cristo, pero es muy probable que ahí hubiera un cuerpo"
Luego, dos científicos de la Universidad de Oxford examinaron una pequeña pieza del sudario con un examen consistente en detectar átomos de carbono radioactivo.
Cuanto más viejo fuera el sudario, menos átomos de carbono contendría.
Una vez listo, se envió al Museo Británico, donde se comparó con los resultados de los otros dos laboratorios que participaron en el proceso, uno en Arizona y el otro en Zurich.
Luego, los estadísticos combinaron los resultados para dar con un número final.
El sudario que, durante siglos, se pensó que era el sudario con el que se enterró a Cristo, era falso.
Los exámenes mostraron que se fabricó entre 1260 y 1390.
La Iglesia nunca había dicho que el sudario fuera auténtico, por lo que aceptó el veredicto de los científicos.
Sin embargo, también agregó que el sudario todavía podía ser objeto de veneración, un símbolo del sufrimiento de Cristo.
Tite afirmó que no se sintió decepcionado con los resultados: "Solo probaron las sospechas que ya tenía", aseguró.
Sin resolver
Pero no todo el mundo reaccionó de la misma manera.
Hubo acusaciones de que Tite estaba involucrado en una trama masónica, de que los resultados no eran válidos porque la muestra estaba contaminada.
El experto señaló que todas esas dudas se comprobaron en los exámenes y que el resultado final que se obtuvo fue muy preciso.
Entonces ¿cómo llegó hasta ahí la imagen?
"No hay evidencia real de que sea pintura, no creo que fuera pintada", dijo.
"Y otra cosa extraña es que si uno mira todos los cuadros de la Edad Media y el Renacimiento, todos pintan a Cristo con clavos que atraviesan la palma de la mano", añadió.
¿Se acabó de verdad el misterio? |
"Pero en realidad, si se quiere crucificar a alguien, para que el cuerpo se mantenga en la cruz, hay que poner los clavos a través de muñecas y los tobillos".
Y así es como aparecen las marcas en el sudario.
Entonces, ¿sigue siendo un misterio científico?
"No creo que sea el sudario de Cristo, pero es muy probable que ahí hubiera un cuerpo", sostuvo.
"Era el tiempo de las Cruzadas y una de las formas de humillar a un cristiano era crucificarlo. Los fluidos causados por el estrés de la crucifixión pueden haber provocado la decoloración y el deterioro del sudario", explicó.
Así que el debate continúa sobre cuál es el origen de la tela y cómo la imagen de un hombre acabó impresa en ella.