La industria de la moda encuentra su inspiración en los lugares menos esperados, incluso en aquellos que han sido por décadas una materia netamente intelectual.
Sin embargo, los actuales diseñadores tienen mucho que rescatar de la filosofía. Así, en las últimas colecciones de Dior, Chanel o Gucci, no es extraño encontrar referencias a grandes mentes como la de Walter Benjamin.
Según consigna The Guardian, el trabajo del filósofo y teórico de origen alemán se convirtió en la base inspiracional de las últimas tendencias de la pasarela, siendo utilizado por figuras como el director artístico de Gucci Alessandro Michele, quien rescató su idea de "constelación".
Esta idea, según Benjamin, se trata sobre el entendimiento de la historia no sólo como un continuo paso del tiempo, sino como algo que se produce en el presente; algo muy visible en el trabajo de Michele, quien se caracteriza por su habilidad de incorporar elementos de distintas décadas en un sólo atuendo.
Pero esta no es la única idea del filósofo que hace referencia a la moda. En su trabajo "La obra de arte en la era de la reproductibilidad técnica" (1936), discute cómo el arte es capaz de conservar su autenticidad en un mundo en donde la fotografía y el cine abren la posibilidad de su reproducción.
Además, cuando se refiere a "la extraña sensación ante la imagen de uno mismo en el espejo", explica que "la imagen se ha convertido en algo separable, transportable. ¿Y dónde se transporta? ante el público". Una gran explicación para establecer una relación entre su teoría y las actuales selfies que abundan entre los rostros más importantes de la industria.
Sin embargo, Benjamin no es el único referente para los diseñadores en la actualidad. Recientemente vimos cómo el mensaje "we should all be feminists" (todos deberíamos ser feministas por su traducción al español), de la escritora nigeriana Chimamanda Ngozi, inundó las pasarelas durante el desfile de Dior.
