Una película de animación acaba de hacer historia en Japón.
Se titula Kimi no Na wa ("Tu nombre"), es una cinta fantástica que tiene como protagonistas a dos adolescentes.
Y es la primera que, sin haber sido producida por el legendario Studio Ghibli — el estudio que animó La princesa Mononoke, escrita y dirigida por Hayao Miyazaki y ganadora del premio a la mejor película de la Academia de Japón—, ha recaudado más de 10 billones de yenes (US$98 millones) en un mes.
¿Pero atrae tanto a la audiencia?
1. Fantasea con intercambiar cuerpos
Kimi no Na wa es una película fantástica sobre el intercambio de cuerpos protagonizada por dos adolescentes.
Está basada en una novela y cuenta la historia de Mitsuha, la alumna de una escuela rural de Japón, y de Taki, un estudiante de secundaria de la capital, Tokio.
Mitsuha empieza a imaginarse a sí misma como un chico. Y a su vez, Taki comienza a mirar el mundo a través de los ojos de una joven del campo japonés.
El resto de la película explora su intercambio corporal y el viaje que emprenden en el tiempo.
2. Refleja los intercambios de sexo de los antiguos cuentos japoneses
Lo que inspiró al director, Makoto Shinkai, fue un cuento clásico japonés del siglo XII, titulado Torikaebaya Monogatari.
Es la historia de dos hermanos, en la que él es criado como niña y ella como niño debido a sus personalidades.
Pero ese cuento no es el único trabajo japonés que habla de la temática.
Tenkousei, una película de 1982, también narra las vivencias de dos adolescentes que intercambian cuerpos al caerse en las escaleras de un templo.
Y algo similar les pasaba a los protagonistas de Papa to Musume no Nanokakan, una teleserie de 2007.
3. Capta la melancolía de los sueños adolescentes
La película trata temas universales, como el paso de la adolescencia a la edad adulta y la lucha por afirmar tu identidad en un mundo tan confuso.
En Kimi no Na wa sus protagonistas se despiertan siendo el otro y la línea entre la realidad y el sueño se difumina constantemente.
En este aspecto de la cinta se ve el claro influjo del famoso poema japonés titulado Yume to Shiriseba, que dice así:
Me pregunto si apareció en mi sueño porque me acosté pensando en él
No me hubiera podido despertar si hubiera sabido que era un sueño
Es esa melancolía y esa sensación de nublada debilidad post sueño la que Shinkai quería lograr con su película y lo ha conseguido.
4. Recuerda el terremoto que cambió una nación
La película también bebe de las consecuencias del devastador terremoto de 2011, el más potente jamás registrado en Japón y que se cobró 16.000 vidas.
Shinkai habló de ello con la revista Diamond y aseguró que la desgracia lo cambió no sólo a él, sino a toda la sociedad japonesa.
Así que, como referencia a ello, Kimi no Na wa también se ve ensombrecida por la amenaza de un desastre natural.
El director cuenta que de alguna manera utilizó la película para reflejar una sensación que muchos, incluido él mismo comparten: que en cualquier momento puede pasar una catástrofe.
"Nunca sabes si Tokio se convertirá en algo así", dice Taki en un momento del filme.
"Toma cinco años digerir una experiencia tan impactante y sublimarla a ese nivel de arte", escribió en Twitter un usuario, Yoshinaga Tastuki.
5. Sus hermosas animaciones se basan lugares reales, a los que los fans ya están peregrinando
Además de por la sutil profundidad de la historia, la película también está siendo aclamada por la belleza de sus gráficos que, en muchos casos, son animaciones de lugares reales.
"Por fin vi Kimi no Na wa. La historia, la actuación, la música son muy buenas pero sobre todo me abrumó la hermosura de las imágenes. Cada plano era increible", escribió un usuario en la red social Twitter.
Otros compartieron emplazamientos reales sobre los que se hicieron las animaciones de la película y que ya se han vuelto lugar de peregrinación para los fans.
Estos incluyen la casa de Shinkai en la prefectura de Nagano, ubicada en la isla de Honshū, la prefectura de Gifu y algunos rincones de Tokio.
"Se pensó cada detalle con cuidado y el filme se hizo con una gran precisión y pasión", le dijo a la BBC un aficionado al anime, el canadiense Ismael Ramos.
"Tiene el equilibrio perfecto entre el arte, la música y el relato".
6. Abre la puerta a la siguiente generación del 'anime' japonés
Para tener tal éxito, Kimi no Na wa ha tenido que trascender ciertos límites y atraer a una audiencia más amplia que la de los jóvenes y los fans leales al anime.
Como consecuencia, hay quien considera a Shinkai el nuevo Hayao Miyazaki.
Miyazaki es el escritor y director de las premiadas Mononoke-hime (La princesa Mononoke), Sen to Chihiro no kamikakushi(Spirited Away o El viaje de Chihiro) y Hauru no ugoku shiro(El increíble castillo vagabundo), y se le atribuye el triunfo de haber abierto la animación japonesa a la audiencia global.
Todas esas obras las produjo con el Studio Ghibli y rompieron la marca de los 10 billones de yenes (US$98 millones).
"Shinkai está en camino de lograr el estatus de Miyazaki con Kimi no Na wa", exclama un usuario en Twitter.
Aunque otros tienen una opinión ligeramente distinta.
"Creo que Miyazaki y Shinkai tienen, de hecho, estilos muy distintos, aunque son igualmente potentes", explica Ramos.
"Lo que tienen en común es la habilidad de llevar a la audiencia en un viaje, de hacerles vivir una experiencia, y eso es, al fin y al cabo, el objetivo último de cualquier artista".