Tras la llegada del nuevo año muchos hacen un mea culpa por los excesos de comida, derivados en los kilos de más.
Sin embargo, los alimentos no son los únicos protagonistas del sobrepeso. El alcohol también juega un rol fundamental.
Las calorías del alcohol se califican como "calorías vacías", es decir, sin valor nutricional. Consumir alcohol reduce la cantidad de grasa que el cuerpo quema para obtener energía.
Casi 400 hamburguesas al año
Uno de las bebidas más comunes y universales, la cerveza, puede ser engañadora. Una lata de 330 ml de cerveza contiene unas 142 calorías, es decir, media hamburguesa. Pero consumir dos cervezas al día equivaldría a comerse unas 370 hamburguesas al año.
Entre los más calóricos está el ron. 50 ml de ron equivale a unas 120 calorías. Si a eso le sumamos 250ml de bebida cola, la reconocida "roncola" o Cuba Libre asciende a unas 225 calorías.
Y entre las bebidas alcohólicas más "light", es decir, que menos calorías aportan son el vino o los espumantes –champaña, prosecco o cava- cuya copa de 175 ml equivale a unas 133 calorías.
Sin embargo, tomar una botella de vino equivale a comerse más de tres hamburguesas.
El problema es que no mucha gente es consciente de su ingesta de calorías cada vez que se va de copas.
No te pierdas este video donde le pedimos a periodistas de la BBC que ordenaran cuatro opciones -ron con cola, vino tinto, cerveza y papas fritas- de mayor a menor según su cantidad de calorías.
Fuente: Servicio Nacional de Salud de Reino Unido (NHS)