Masculino o femenino: más de 500 especies de peces pueden cambiar de sexo. Lo mismo se aplica a los humanos: el género no siempre está tan claramente definido como pensamos.
Cardúmenes de hembras Junker de cabeza azul-amarilla nadan en los arrecifes de coral del Caribe. El único macho del enjambre tiene cabeza azul. Si el macho muere, la hembra más grande se transforma en un nuevo macho. En diez minutos cambia su comportamiento, y diez días más tarde ha transformado todo su aparato sexual. Sin ninguna intervención exterior, la cabeza de la hembra cambia al color azul y sus ovarios se convierten en testículos.
Un equipo de científicos de Australia, Nueva Zelanda y Estados Unidos descubrió que los peces en estas situaciones liberan una señal química que activa ciertos genes y desactiva otros. Alrededor de 500 especies de peces pueden cambiar su sexo en edad adulta.
Incluso algunos reptiles en estado embrionario pueden cambiar su género en el huevo. A ciertas temperaturas nacen hembras, y a otras, machos. El cambio de temperatura activa o desactiva ciertos genes. En los mamíferos, todavía no se ha detectado ningún cambio natural de género. Pero los estudios con ratones muestran que cuando los investigadores activan ciertos genes de los animales, las células de los testículos pueden convertirse en células ováricas.
Establecer el género es más complicado de lo que se cree
Incluso en los humanos, el sexo masculino y femenino no están siempre claramente definidos. Básicamente, existe el cromosoma XY masculino y la pareja de cromosomas femeninos XX. Pero estos no son los únicos que determinan el sexo. Además de los cromosomas y los genes, las hormonas y los receptores, así como los testículos, los ovarios y los genitales externos, son importantes, dice Heinz-Jürgen Voß, biólogo y científico social de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Merseburg.
Hay alrededor de 1.000 genes que pueden influir en el género
Estos diversos parámetros no son siempre femeninos o masculinos. Los biólogos hablan de un espectro en el extremo del cual solo se destacan las características masculinas o femeninas. Hay personas que tienen cromosomas XY pero todavía tienen características sexuales femeninas. Esto puede llevar a variaciones que a menudo pasan inadvertidas.
Cirujanos en Kachemira (India) reportan en el Journal of Surgery Case Studies, un caso en el que, al operar una hernia, encontraron un útero y un oviducto en un hombre de 70 años. El padre de cuatro hijos nunca se lo imaginó.
También hay personas con cromosomas XX que tienen genitales y testículos. Sin embargo, rara vez hay personas que tienen testículos y ovarios, un útero y una próstata, así como un pene y una vagina.
No es hombre, no es mujer, ¿entonces qué es?
Las personas cuyo género no está claramente definido en todos los parámetros se describen como intersexuales. Los expertos suponen que entre el 0.05 y el 1.7% de la población es intersexual. Sin embargo, cuando una persona es intersexual, no significa automáticamente que se sienta atraída por ambos sexos. Intersexual tampoco significa lo mismo que transexual. Los transexuales tienen un género biológico distinto, pero sienten que no están en el cuerpo "correcto".
En Alemania se practican, cada año, aproximadamente 1.900 cirugías y tratamientos hormonales a largo plazo en niños intersexuales menores de 10 años para asignarles un género claro. El número de intervenidos no ha bajado desde 2005, dice la socióloga Ulrike Klöppel. Se desconoce el número exacto de niños operados. "Pero muchas personas rechazan más tarde el género que les fue asignado sin haber tenido en cuenta su propia opinión y no pueden encajar en una de las dos categorías", dice Voß.
Hágase la pregunta
El género no siempre es claramente masculino o femenino. En Alemania, desde el 1 de enero de 2019, se puede ingresar el género "Divers". Anteriormente, desde 2013 se podía dejar en blanco la designación de género en un recién nacido. En 2017, el Tribunal Constitucional Federal dictaminó que esta situación violaba el derecho a la privacidad y la prohibición de la discriminación.
Heinz-Jürgen Voß espera que, al igual que en Argentina, Malta y Pakistán, las personas puedan declarar su género sin un examen médico previo. Cuando tantos y diversos factores influyen en el género, la propia identidad de género debe ser tomada como el parámetro más fuerte, dice Voß : "Cada uno debe preguntárselo”.