Además del reciclaje, existen múltiples formas en las que las personas pueden contribuir al cuidado del medio ambiente. Entre ellas, una de las más importantes es gestionar los hábitos de consumo y alimentación, que de hecho, no solo puede generar resultados positivos para el planeta sino que también para el bolsillo.
Desde los pequeños electrodomésticos, pasando por la conducción, los hábitos de higiene o hasta cuando viajes. Cualquier pequeño gesto de la vida diaria puede ayudarte a ahorrar y al mismo tiempo a cuidar el medio ambiente.
¿Cómo comenzar a gestionar mis hábitos? A continuación te dejamos un listado con cinco tips sencillos para que comiences a cambiar tus hábitos desde casa.
- Elige productos que no estén envasados en plástico y recicla o reutiliza los envases.
- Sé un consumidor responsable. Consume sólo lo que necesitas y agota la vida útil de los productos. En otras palabras: reduce, reutiliza y recicla. También se un consumidor responsable de agua. No desperdicies este cada vez más escaso recurso y al mismo tiempo estarás ahorrando energía porque hacerla llegar a tu casa, tratarla y desecharla implica un gasto energético.
- No uses artículos desechables y exige una ley que los prohíba entrando aquí.
- Digamos no a los transgénicos. Ni en nuestro campo ni en nuestra mesa. Opta por productos frescos y naturales. Lee las etiquetas de los productos que compras. Si en la etiqueta encuentras alguno de estos ingredientes, cuidado, puede ser transgénico: Soya: en forma de harina, proteína, aceites y grasas (a menudo se “esconden” detrás del concepto de aceites o grasas vegetales), emulgentes (lecitina-E322), mono y diglicéridos de ácidos grasos (E471) y ácidos grasos Maíz: en forma de harina, almidón, aceite, sémola, glucosa, jarabe de glucosa, fructosa, dextrosa, maltodextrina, isomaltosa, sorbitol (E420), caramelo (E150)Algodón: en forma de aceite proveniente de semillas Canola: en forma de aceite.
- Cambia el centro comercial por el mercado. Estarás comprando productos más frescos y seguros, sin transgénicos, además de apoyar a productores locales reactivando nuestra economía. Prefiere los productos orgánicos y de comercio justo. Los productos orgánicos respetan el ambiente en su proceso de elaboración y son más sanos y seguros que los procesados de manera industrial.