Por primera vez un telescopio ha captado la imagen de otro sistema solar con dos planetas en órbita alrededor de un sol similar al nuestro, lo cual se logró gracias al telescopio VLT (Very Large Telescope, telescopio muy grande en español) del Observatorio Europeo Austral en el desierto de Atacama.
La foto difundida este miércoles muestra un sol diminuto y dos planetas gaseosos gigantes relativamente cerca. De acuerdo con los patrones galácticos, a 300 años luz de distancia.
1/ Our #VLT has taken the first ever image of a young, Sun-like star accompanied by two giant exoplanets. Until now astronomers had never directly observed more than one planet orbiting a star similar to the Sun. https://t.co/dpmLmFxCMp pic.twitter.com/vwX6tBEj9U
— ESO (@ESO) July 22, 2020
Según explicó Alexander Bohn, de la Universidad Leiden de Holanda y director del estudio que publicó durante esta jornada The Astrophysical Journal Letters, el atractivo de esta imagen radica en que es una “versión muy juvenil de nuestro propio sol”.
Bohn agregó sentirse “extremadamente entusiasmado” por este descubrimiento. “Es la primera vez que los astrónomos pueden captar semejante foto”, comentó en un correo electrónico.
El hallazgo ayudará a que los científicos puedan comprender mejor la evolución de nuestro propio sistema solar.
Acerca del estudio revelado este miércoles, Bohn agregó que muestra “una instantánea de un ambiente muy similar a nuestro sistema solar, pero en una etapa mucho más temprana de su evolución”.
Llamada oficialmente TYC 8998-760-1 y situada en la constelación de la Mosca, la estrella tiene sólo 17 millones de años. Nuestro sol tiene 4.500 millones de años.
En cuanto a los dos planetas captados a su alrededor, las órbitas de estos dos gigantes gaseosos son mucho más distantes del joven sol que las de Júpiter y Saturno del nuestro. Para entender, un año calendario suyo equivale a miles años nuestros. En tanto, sus masas también son mucho mayores que las de nuestros planetas externos.
Instrumentos futuros como el Telescopio Europeo Extremadamente Grande (ELT) del Observatorio Europeo Austral en el desierto de Atacama, previstos para dentro de cinco años, deberán poder detectar planetas más pequeños y menos densos.
Por ahora no hay indicios de la presencia de otros planetas en torno al joven sol, pero “sin duda es posible y podrían ser demasiado tenues”, concluyó Bohn.