Diversos emails personales enviados por David Beckham fueron dados a conocer, en donde se perfilan como una persona obsesionada con la obtención del títuilo de Caballero, llegando incluso a inventar obras benéficas para favorecer la percepción de la opinión pública sobre su imagen personal.
Cuando en 1999 David y Victoria Beckham se casaron no cupo duda de que se estaba construyendo una de las marcas más importantes del mundo. Tal nombre les permitió adueñarse de una fortuna mayor que la que tiene la mismísima realeza británica, avaluada en unas $500 millones de libras.
El "Beckileaks" (como ha sido denominada la filtración de correos enviados por el ex capitán de la selección inglesa de fútbol) reveló información que claramente no esperaba que se diera a conocer.
De la mano de Football Leaks, una página web especializada en mostrar información clasificada de los jugadores de fútbol, se dio a conocer a varios medios europeos una serie de conversaciones entabladas entre el ex futbolista del Manchester United, su representante Simon Oliveira y el agente de futbolistas David Gardner.
De acuerdo a lo que se indica en los correos, el esposo de la ex Spice Girl se muestra empecinado con la idea de obtener el título de Caballero de la Orden del Imperio Británico.
Para tal objetivo, ha sido capaz de utilizar los actos benéficos de la Unicef en su propio beneficio, llegando a pedir que la organización se haga cargo de los gastos que implican los distintos viajes que ha realizado en nombre de ella.
Según constata The Mirror, el acceso a la información se habría realizado por medio de un servidor ruso que albergaba más de 18 millones de emails de Doyen Sports, una agencia de David Beckham con sede en Portugal.
Los hackers llevarían más de un año exigiéndole $1 millón de libras para no hacer públicos sus mensajes. Ante la negativa, los correos fueron dados a conocer.
Al parecer, los más reveladores son aquellos que se enviaron en el año 2014, cuando le fue negada la petición del título de Caballero por las acusaciones que se le hacían frente a una evasión de impuestos en Reino Unido, en donde el Departamento Real de Ingresos y Aduanas fue contundente en su informe.
Frente a esto, el futbolista respondió "no esperaba menos. ¿Quién decide sobre los títulos? Es una vergüenza ser honrado, si fuera americano tendría algo así desde hace diez años”.
En otro correo, Beckham no tuvo problemas en denominar al comité Whitehall (encargado de determinar la entrega de títulos honoríficos), encargado de la denominación, como "unos malagradecidos".
Uno de los que causó más revuelo, fue en uno que al parecer se refiere a la cantante Katherine Jenkins, quien en 2014 recibió el título de Oficial de la Orden del Imperio (OBE), considerado como un paso previo a la unción de Caballero y que el ex capitán ostenta desde el año 2003.
En tal mensaje enviado a Oliveira, atacó personalmente a Jenkins por una confesión que había realizado en 2008 al Daily Mail, en donde asume que tuvo problemas con las drogas en su pasado. "OBE a Katherine Jenkins, ¿por qué? Por cantar en el rugby, visitar a las tropas y admitir que tomaba coca. Vaya chiste, si te preguntan deberíamos pensar en algún comentario tajante”.
Frente a esta situación, también quedó registro de la nueva estrategia que adoptó Beckham y su equipo: mejorar su imagen por medio de la participación en "The David Beckham Unicef Found".
"Lo único que hemos hecho es inventar acciones benéficas para que él quede bien", dice Oliveira en algunos de los correos en los que define la filantropía como un problema para el futbolista.
Y aunque se ha mostrado a través de su Instagram visitando distintos proyectos, su respuesta fue clara y negativa cuando se le solicitó donar medio millón de dólares para una causa benéfica en Shangai. "No quiero poner mi dinero personal en esta causa (...) Este dinero es mío”, expresó.
Otros mails revelan las ganas de que la Unicef se hiciera cargo de sus vuelos en clase business, que tienen un costo de más de $5.300.000 pesos, con el fin de visitar otro proyecto ubicado en Asia.
De hecho, en uno de los viajes realizados a Camboya, el marido de Victoria pidió que trasladaran su alojamiento de un hotel cinco estrellas a un resort cinco estrellas aún más lujoso, y cuya factura habría sido cobrada a la Unicef.
Los Beckham se defienden
Lejos de mantenerse en silencio, la pareja ha respondido a las filtraciones. "Solo soy una persona normal que está muy decepcionada por no obtener un título de caballero”, expresó David a través de intermediarios al Daily Mail.
De acuerdo con lo indicado por The Independent, fuentes cercanas al inglés han asegurado que la información filtrada "da una imagen deliberadamente incorrecta" porque fue fruto de "el calor del momento".
"La historia se basa en material antiguo, sacado de contexto, manipulado y pirateado de cuentas de correo electrónico desde el servidor de un tercero. Ofrece una imagen distorsionada", expresan sin negar la veracidad de los mails.
