Son productoras de miel, cumplen un servicio ecológico fundamental polinizando a la mayoría de las plantas que nos brindan alimentos y, por si fuera poco, son capaces de entender el concepto del cero.
La capacidad de las abejas para entender la falta absoluta de cantidad fue descubierta por investigadores de la Universidad RMIT de Melbourne, en Australia, que presentaron recientemente el resultado de sus estudios en una conferencia sobre comportamiento en Portugal.
La idea del cero es difícil de entender incluso para los humanos: los niños pequeños suelen tener dificultad para ello y lo aprenden después de otros números.
En el reino animal tampoco abunda la compresión de este concepto. Pero mientras que los monos y los chimpancés, por ejemplo, pueden llegar a aprenderlo, sorprende que las abejas, que tienen un cerebro tan pequeño, también puedan hacerlo.
De hecho, son los primeros invertebrados que han demostrado esta curiosa habilidad.
Premios y castigos
Para poner a prueba esta capacidad, los científicos utilizaron abejas melíferas.
Crearon dos plataformas en las que colocaron entre uno y cuatro objetos iguales.
Y como las abejas aprenden más rápido no solo cuando se las premia si hacen lo correcto, sino también cuando se las castiga cuando se equivocan, las recompensaban con una sustancia dulce cuando volaban hacia la plataforma con menos objetos y las castigaban con una solución de sabor desagradable cuando elegían la que tenía más.
En el 80% de los casos, se inclinaron por la opción que ofrecía menos objetos.
Cuando tenían que elegir entre una con pocos objetos y otra con cero objetos, elegían cero.
Para las abejas, el cero es un número
En una segunda etapa, repitieron el mismo experimento pero variando el número de objetos.
Aquí, siguieron eligiendo la plataforma donde no había objetos, pero cometían más errores y demoraban más cuando tenían que elegir entre esta y una plataforma con un objeto y otra con seis.
De acuerdo a los científicos, el hecho de que la diferencia de cantidad afectara la capacidad para resolver el problema, muestra que las abejas entienden que el cero es un número.
Por qué o cómo lo hacen es aún un misterio.
"Todavía tenemos algunas cosas que descubrir sobre las razones que le permiten hacer esto", le explicó a la revista New Scientist Scarlett Howard, coautora de la investigación.
El estudio aún debe ser sometido a una revisión por pares.