Una lata de cerveza y un paquete de galletas rellenas de crema son el secreto de una larga vida para un inglesa de Blackpool que ya celebró sus 100 años.
Eileen Maher, que tuvo la profesión de tejedora, marcó su siglo de vida en el hogar de retiro Alexandra, ciudad del noroeste de Inglaterra.
Maher es prueba fehaciente de que nunca se es demasiado vieja para disfrutar de una fiesta de cumpleaños, que celebró con su acostumbrada cerveza marca Stella y galletas.
"Es una mujer muy especial", dijo Elaine Wright, la administradora del hogar. "Eileen dijo quería recibir su telegrama de la reina y de sentir el amor de todos aquí. Eso no es difícil".
Wright agregó que a la nueva centenaria, que se casó con un pianista de jazz a los 33 años, le gustaba de pastel y el jerez pero que no podía estar sin su dosis diaria de Stella y galletas de crema.
"Siempre tenemos un suministro de Stella sólo para Eileen", señaló Wright. "Adora su Stella".
Maher vive en Blackpool desde que pasó su luna de miel allí, en 1951, con su ahora fallecido esposo y nunca regresó a su sitio de origen. Desde mayo de 2015 vive en un hogar de retiro.
Además de tomarse su primer selfie, en su fiesta también bailó con la hija de su desaparecida mejor amiga Pauline Green, que viajó desde Surrey, al sur de Londres, para la ocasión.
"No esperaba una fiesta para mi cumpleaños, pero esto es encantador, sobre todo que me canten", declaró la señora Maher. "Ha sido tan emocionante. No duermo bien pero seguro que lo haré esta noche".
Pauline Green dijo que su madre y la señora Maher eran inseparables y que ella la considera como su tía.
"Es una magnífica mujer y ha tenido -y tiene- una vida llena. Ella es muy importante para mí".
