A primera vista, probablemente no reconocerías a Javier Botet.
Aunque su nombre no es conocido, este español tiene un portfolio por el que muchos matarían en el negocio del cine.
En los últimos años, este actor de casi dos metros de alto ha protagonizado algunas de las mayores producciones de terror y fantasía de Hollywood.
Desde "It" a "Mamá" o "Slender Man", con un cameo en "Juego de Tronos", Javier se ha forjado una reputación como uno de los mejores actores de monstruos en la industria.
Durante su infancia en una pequeña ciudad al norte de Madrid, Javier desarrolló un amor por la ciencia ficción y lo sobrenatural.
Creció dibujando monstruos y finalmente se mudó a la capital para dedicarse al arte. Mientras estaba allí, comenzó a interesarse por el cine y a producir cortometrajes.
Un día fue a un taller de efectos especiales. Tanto él como el profesor pensaron que su constitución era perfecta para probar el maquillaje de monstruos.
"No me daba cuenta, pero nací para actuar", dice Javier.
"Tengo una enfermedad llamada síndrome de Marfan. Hace que las personas sean más delgadas, altas y muy flexibles".
"Así que toda mi vida fui muy flexible, llevaba toda la vida haciendo trucos extraños y cosas para disfrutar con mis amigos [usando] movimientos espeluznantes".
Su condición significa que sus extremidades y dedos son más largos que el promedio y pueden moverse de formas poco usuales.
El tutor lo presentó para varios papeles y en un par de meses obtuvo un pequeño papel en su primera película en español. Esto hizo que las cosas empezaran a rodar.
Su golpe de suerte en Hollywood llegó mientras publicitaba su trabajo en una película de una saga de terror en español, Rec 2, en una convención en 2009 en Texas.
Allí, conoció al director argentino Andrés Muschietti cuando estaba promoviendo un corto, llamado "Mamá", que esperaba convertir en una película completa.
Le dijo a Javier que sería perfecto en el papel principal, y un año después, con Guillermo del Toro como productor de la película, Javier recibió la oferta oficial.
Pero cuando salió la película en 2013, muchos fanáticos asumieron que Mamá, una mujer fantasma, había sido creada digitalmente.
"Así que nadie sabía realmente que el 90% de lo que vieron era totalmente mío, era trabajo físico", dice.
Los fabricantes decidieron entonces subir a internet la prueba de movimiento de Javier, mostrando cómo se movía de manera extraña, utilizando su hiperflexibilidad.
El clip ha sido visto cientos de miles de veces desde entonces. Muchos directores y productores han explicado que fue por este clip que decidieron contratar a Javier.
Él se ríe cuando bromea con que su "mejor trabajo" fue probablemente el clip de YouTube.
"Ese fue el verdadero punto que hace crecer mi carrera", dice. "Porque mucha gente se dio cuenta de que mi trabajo sin imágenes generadas por computadora es casi igual de bueno, no necesita mucha más ayuda digital".
Desde entonces, ha protagonizado grandes franquicias de terror como "La noche del demonio", "Alien" y "El conjuro".
También participó en el remake de "La momia", en "El renacido" e hizo una aparición particularmente memorable como leproso en el remake de "It", de Stephen King, en 2017.
La película se convirtió en un gran éxito de taquilla en 2017, y este año también actuará en la secuela, con un nuevo elenco de adultos.
Más recientemente, apareció como uno de los Caminante Blancos, acechando a Arya Stark, en un episodio épico de la última temporada de "Juego de tronos".
Como fanático del género de toda la vida, describe trabajar en estas producciones con grandes estrellas de Hollywood como "un regalo".
Javier dice que nunca se asusta con lo que ve en el espejo. Sus cuentas en las redes sociales están llenas de fotos y videos divertidos entre bastidores, a menudo totalmente disfrazado.
Su madre, que tiene unos 60 años, se ha convertido en una conversa de las películas de terror. Aunque al principio le daban miedo, ahora incluso lleva a sus amigos al cine para ver las películas de Javier cuando él está trabajando fuera del país.
"Al principio fue un poco más difícil. Ella decía: 'Quiero que representes papeles dramáticos y de buen tipo'", dice Javier.
En España, sin embargo, no todo es horror. Javier también actúa en comedias y escribe y dirige su propio trabajo.
Pero aún disfruta realmente de sus papeles de horror en Hollywood, y siempre trata de aprender nuevas técnicas, como la danza, para enriquecer sus actuaciones.
Transformarse para estos papeles puede implicar pasar horas y horas en la silla de maquillaje.
Una de las personas responsables de dar vida a sus personajes es el artista de maquillaje español David Martí, de la empresa de efectos especiales DDTSFX.
Ha trabajado con Javier en varias películas, incluyendo "Crimson Peak" ("La cumbre escarlata"). David ganó un Oscar por su trabajo con otro peso pesado entre los actores de monstruos, Doug Jones, en la película "El laberinto del fauno".
Al haber crecido también en España en la década de 1980, David recuerda intentar aprender solo cómo crear looks de horror, inspirados en revistas importadas de Estados Unidos como Fangoria.
Fue mucho ensayo y error. Recuerda, por ejemplo, no haber comprendido qué era el "látex de espuma" y tratar de usar el relleno del sofá para recrear un look.
"Fue todo investigación y bueno, muchos accidentes al principio porque obviamente no había internet, no había información", dice.
Describe el producto final de las criaturas y los personajes como una colaboración, con algunos directores más involucrados en el concepto que otros.
Dice que el look final puede ser un proceso de desarrollo, con diseños que cambian a lo largo de la producción.
David tiene palabras de elogio para los actores, incluido Javier, que están debajo de todo el maquillaje.
"Muchas veces los llaman 'artistas de criaturas' o 'chicos monstruo', lo que no es correcto, son actores", dice David. "Veo a gente como Doug o Javier y pienso: '¿Qué demonios? No deberías llevar una máscara".
Dice que consideró brevemente si debería cambiar de profesión para hacer imágenes generadas por computadora en la década de 1990 después de ver su uso pionero en producciones como "Parque Jurásico", asumiendo que su trabajo eventualmente se volvería redundante.
"Pero esta tecnología no nos dejó sin trabajo, en realidad nos está dando más trabajo y eso es algo bueno", dice David.
A menudo, las dos habilidades pueden complementarse entre sí. En "Mamá" y "Crimson Peak", se agregaron efectos digitales para mejorar el trabajo de DDTSFX.
Javier cree que no importa cuán lejos vaya la tecnología, los actores como él siempre tendrán valor en la industria.
"Cuando hay algo digital, cualquier cosa puede pasar. Es como un dibujo animado: pierdes el susto y el miedo", dice.
"Prefiero 100 veces que sientas que algo es real, puedes tocarlo, existe y puede suceder".
