Dieta pegana: ¿en qué consiste y qué beneficios (y carencias) tiene?
Parece ser la tendencia de este recién estrenado 2019: la dieta pegana, una combinación entre los regímenes paleo y vegano.
En Estados Unidos ha sido uno de los términos más buscados en Google desde que su creador, Mark Hyman, publicó su libro "Comida: qué diablos debería comer" (Food: What the Heck Should I Eat, en inglés).
También en México, Google Trends (la herramienta del buscador que muestra las palabras y términos que generan más interés) este tipo de régimen muestra un creciente interés entre los internautas desde principios de este año.
Y de acuerdo con datos de la red social Pinrest, las búsquedas de la dieta pegana se han incrementado en un 337% desde que en febrero de 2018 Hyman sacara su libro a la venta.
¿En qué consiste?
La dieta pegana es una especie de combinación de la dieta paleo, basada en los alimentos similares a los que habrían existido en el Paleolítico y que suele contener carne de res magra, pescado, frutas, vegetales, frutos secos y semillas; y la dieta vegana, que excluye todos los alimentos de origen animal, incluidos los huevos y productos lácteos.
Así que la dieta pegana da especial importancia a los alimentos frescos de origen vegetal pero añade también productos orgánicos de origen animal como el pescado graso y la carne.
En concreto, un 75% de los alimentos que se consumen en la dieta pegana son frutas y verduras. El 25% restante son carnes y grasas saludables de origen animal.
Los granos de casi cualquier tipo (incluidos integrales) y las legumbres están prohibidos.
También hay altas restricciones a los productos lácteos, que son permitidos solo de forma excepcional, en cantidades pequeñas y únicamente si son orgánicos y provienen de animales alimentados exclusivamente con pasto.
Pero, ¿es realmente beneficiosa para tu salud?
Directrices generales
La recomendación general de los nutricionistas es que no debemos suprimir ningún grupo de alimentos de nuestra dieta. Simplemente hay que saber las cantidades recomendadas que nuestro cuerpo necesita.
Es también la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, que en su página web establece porcentajes y listados de los distintos alimentos que deberíamos incluir en nuestra ingesta diaria.
Pero a pesar de esto, en los últimos años hemos visto todo tipo de dietas que se basan en restringir ciertos grupos alimenticios.
La mencionada dieta paleo, la polémica dieta cetogénica (que basa un 75% de su ingesta en grasas "buenas" y reduce sustancialmente los carbohidratos y la glucosa, eliminando el consumo de frutas) o la dieta hipocalórica Atkin.
Todas tienen sus amantes y detractores. También la dieta de moda, la pegana.
Pros y contras
Algunos profesionales han resaltado las ventajas de esta dieta porque contiene muchos productos necesarios para una dieta sana como las verduras, frutas y proteínas.
Además, destacan que elimina los alimentos procesados, las grasas saturadas y los azúcares.
Pero también prohíbe o restringe alimentos considerados fundamentales en una dieta equilibrada: los carbohidratos, las legumbres y los lácteos.
La British Nutrition Foundation publicó hace poco una nueva guía en la que establece las porciones adecuadas de alimentos para tener una dieta sana. Sus recomendaciones se distancian mucho de aquellas que exige la dieta pegana.
La nutricionista Carrie Dennett, que escribe para el diario The Washington Post, asegura que la supresión de los granos libres de gluten como la quinoa, el arroz integral y la avena bajo el argumento de que pueden producir autoinmunidad no está avalada por la ciencia.
Otro nutricionista, Wesley Delbridge, portavoz de la Academia de Nutrición y Dietética de Estados Unidos, también ve innecesario eliminar legumbres como los frijoles, un "súper alimento de la naturaleza".
Así que, pese a que los nutricionistas parecen valorar la mayor variedad de alimentos que permite la dieta pegana con respecto a la paleolítica o vegana, la recomendación general de los profesionales parece seguir siendo la misma: incluir un poco de cada alimento en tu ingesta diaria.
En cualquier caso, si estás o quieres ponerte a dieta, todos los especialistas aconsejan hacerlo siempre bajo la supervisión de un profesional.