Cuando los adultos no se ocupan de algo, los niños pueden aparecer para llamarles la atención sobre sus omisiones.
Un grupo de niños y jóvenes en Portugal está utilizando la ley de derechos humanos para obligar a los políticos europeos a abordar el cambio climático, pero no solo están tomando medidas contra su país, sino contra un total de 33 estados europeos.
"Queremos que nuestra generación y las generaciones futuras tengan los mismos privilegios que la generación de nuestros padres", explican los hermanos portugueses Sofia y André Oliveira, dos de los seis niños y jóvenes portugueses que iniciaron la demanda.
Los países incluidos en el juicio son los 27 pertenecientes a la Unión Europea, más Noruega, Rusia, Suiza, Turquía, Ucrania y Reino Unido.
El caso, que fue presentado ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, alega que estos países no hicieron lo suficiente para evitar los devastadores incendios forestales que sufrió Portugal en 2017, precedidos por fuertes olas de calor que, a su vez, son cuasadas por el cambio climático.
El tribunal aceptó el caso y le dio prioridad.
Los jóvenes -que tienen entre 9 y 22 años- denuncian que la inacción de los gobiernos europeos ante el cambio climático viola sus derechos humanos individuales.
"Queremos que ellos [los gobernantes] vean esto como una segunda oportunidad. No como un ataque, sino como una oportunidad", dice André, de 13 años.
Es la primera vez que se presenta un caso relacionado con el clima en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Los niños y jóvenes dicen que la escasa acción para prevenir el impacto del cambio climático va en contra de su derecho a la "vida, la privacidad y la no discriminación" en virtud del Convenio Europeo de Derechos Humanos.
"Si los adultos no están haciendo lo correcto, los niños y los adultos jóvenes podemos hacerlo. Es por eso que en este caso se trata de adultos jóvenes y no de adultos", dice Sofia Oliveira, quien ahora tiene 16 años.
"Espero que ganemos porque sería algo muy grande que haríamos. E incluso si no ganamos, creo que podemos dar un ejemplo a otras personas para que puedan seguirlo", añade su hermano.
Ahora, los demandantes y su equipo legal deberán responder a las defensas de los estados europeos antes del 9 de febrero.
Los modelos científicos estiman que los niños nacidos en 2020 enfrentarán siete veces más olas de calor que sus abuelos.
Estas conclusiones pertenecen a un estudio publicado en septiembre de 2021 en la revista Science, basado en proyecciones de tamaño y edad de la población global, temperaturas futuras y eventos climáticos extremos, con datos del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU.
Precedente en América Latina
No es la primera vez que niños y jóvenes plantean acciones legales en el intento de proteger su futuro y el del planeta.
En 2018 en Colombia, 25 niños y jóvenes ganaron una demanda contra el gobierno por no proteger la selva amazónica de su país.
El tribunal dijo que la deforestación iba en contra de los derechos tanto de los jóvenes como de la selva tropical y ordenó al gobierno reducir la tasa neta a cero para 2020.
La Corte Suprema finalmente falló a favor de la Amazonía, por lo que era la primera vez que una demanda de este tipo se decidía a favor del medioambiente en América Latina.
El tribunal incluso decidió reconocer a la Amazonía con los mismos derechos que un ser humano.
A pesar del fallo, la deforestación en la Amazonía ha aumentado y alrededor del 75% de toda la deforestación en Colombia ha ocurrido en esta región.
Otros casos similares tuvieron lugar en Países Bajos, Alemania y Pakistán.