Las princesas de Disney junto a los superhéroes de Marvel; los juguetes de Toy Story con los animales de "La Era del Hielo"; Bart Simpson y Mickey Mouse.
La compra por parte de Disney de la división de entretenimiento de Fox por US$52.400 millones vaticina un sacudón en el mundo del consumo digital y audiovisual.
"Esta adquisición que antes habría sido impensable promete transformar Hollywood y Silicon Valley. Es el contraataque más grande de una compañía de medios tradicional en contra de los gigantes tecnológicos que se han metido de forma agresiva en el negocio del entretenimiento", señaló en un análisis el diario The New York Times.
"Ahora Disney tiene suficiente músculo para convertirse en un verdadero competidor de Netflix, Apple, Amazon, Google y Facebook en el mundo de acelerado crecimiento del video en línea", agregó el diario estadounidense.
Pero, ¿qué obtiene Disney con esta multimillonaria jugada?
Lo que aporta Fox
La división de entretenimiento de 21st Century Fox tiene un amplio catálogo de éxitos entre los que se cuentan las cintas originales de "La Guerra de las Galaxias", la renacida franquicia del "Planeta de los Simios", las animaciones de "La Era del Hielo", las películas de los superhéroes de Marvel -que incluyen a los X-Men y a "Los 4 Fantásticos", entre otros- así como la saga de "Avatar".
También incluye los estudios de 20th Century Fox, desde donde se impulsó la carrera de Marilyn Monroe y se produjeron clásicos como "La novicia rebelde" (The Sound of Music, por su título en inglés), pero también otros éxitos como las series de "Mi pobre angelito" (Home Alone) y de Doctor Dolittle.
Disney también adquiere los estudios de televisión de Fox, responsables de unas 36 series, incluyendo grandes éxitos como Los Simpsons, Family Guy, Homeland, Expedientes Secretos X, The Walking Dead y Modern Family, entre otros.
Todas estas producciones se sumarán al catálogo propio de Disney que ya había crecido con la adquisición de Pixar, Lucasfilm y de Marvel; y que en tiempos recientes produjo superéxitos como Frozen, Toy Story y The Avengers.
La compra de la división de entretenimiento de Fox trae consigo numerosos canales de televisión, entre los cuales se cuentan los de National Geographic, el canal FX y la red de 22 canales regionales de deportes que Fox tiene en Estados Unidos.
Otro elemento de la negociación es que Disney ahora obtendrá el control accionario del servicio de video por streaming Hulu, que puede tener un papel clave en el futuro de la compañía.
La compra de Fox, por otra parte, también incluye la adquisición del canal Star India, de India; y de una parte de la acciones de la cadena británica Sky.
La nueva apuesta de Disney
Estas adquisiciones vendrán a reforzar los planes de Disney de lanzar dos servicios de streaming al estilo de Netflix.
El primero en ver la luz será ESPN Plus, que estará centrado en deportes y se espera que esté en marcha en el primer semestre de 2018. Esta iniciativa puede verse reforzada con toda la oferta deportiva adquirida a Fox.
Estaba previsto que el segundo servicio de streaming, que aún no tiene nombre formal, iba a crearse a partir de los productos de Disney, Marvel, Pixar y Lucasfilm. Grandes marcas de la industria a las que ahora quizá se podrán incorporar también las producciones de entretenimiento de Fox.
Un elemento curioso de estas jugada empresarial es que, al igual que la inesperada victoria presidencial de Donald Trump, ya había sido anticipada hace 19 años en Los Simpson que en su décima temporada -en noviembre de 1998- emitieron un capítulo en el que aparecía una valla con al logo de los estudios de 20th Century Fox bajo el que se leía: "Una división de Walt Disney Co".