Anick, una persona intersexual: "Ahora que tengo un nuevo pene espero encontrar el amor"
Anick, de 23 años, es un hombre intersexual que ha tenido que someterse a una serie de operaciones para conseguir un pene completamente funcional. La BBC le ha acompañado durante este proceso.
"He perdido la cuenta de cuántos médicos y enfermeras me han visto desnudo a lo largo de los años", dice Anick con humor. "En los últimos años han sido más de 100".
Anick nació con genitales que no se parecían ni a los de un niño ni a los de una niña.
"Los médicos dijeron a mis padres que era probable que fuese un chico, pero que no estaban seguros", dice.
Tenía testículos, pero estaban en el lugar equivocado. A los cuatro meses le operaron para cambiarlos de sitio.
A lo largo de su infancia escuchó muchas veces que él no era como los otros niños.
"Sabía que era diferente a los demás pero no entendía por qué", dice Anick.
"Sabía que mis padres me querían, pero al mismo tiempo me llevaban al hospital cada seis meses, donde los médicos usaban palabras como anormal y atípico para referirse a mí".
Le resultó difícil hacer amigos en la escuela y recuerda contener el aliento cuando era pequeño en un intento por asfixiarse.
Después de un intento de suicidio más grave a la edad de 14 años sus padres le llevaron al psicólogo. Pero no se animó a revelarle la fuente de sus problemas.
"No quería que nadie más lo supiera", recuerda. "Me sentía muy aislado".
"Pensaba que nadie entendía por qué era diferente y que era el único caso en el mundo".
Fue sólo hace cinco años, cuando cumplió los 18, que descubrió que había un nombre para personas como él: intersexual.
Descubrir que había otras personas como él lo cambió todo.
"De repente me di cuenta de que no tengo que avergonzarme de quién soy o de cómo nací".
Los médicos le habían dicho que al cumplir los 18 podría comenzar una cirugía reconstructiva para crear un nuevo pene. Le dijeron que no se apresurara a tomar ninguna decisión y que sólo siguiese adelante si se sentía cómodo.
Tres años más tarde, en 2016, Anick decidió que estaba preparado.
"Ahí fue cuando tuve una epifanía", dice. "Necesitaba decirle la verdad a la gente. Iba a tener que pasar por un montón de cirugías y no podía estar utilizando siempre la excusa de que me tenía que sacar el apéndice".
Empezó por revelarle la verdad a sus primos, tíos y tías y se sorprendió cuando no reaccionaron con disgusto.
"No sabía que la gente iba a aceptar algo que había estado escondiendo durante tanto tiempo", dice.
La operación final se programó para junio de 2018. Esto le dio a Anick la esperanza de que en poco tiempo se sentiría lo suficientemente seguro como para embarcarse en su primera relación romántica.
En febrero de 2018, Anick asistió a la Conferencia Internacional Intersexual (OII por sus siglas en inglés) en Copenhague.
Estaba emocionado pero nervioso.
Personas como Anick acudieron de todas partes del mundo para compartir sus experiencias.
"Por extraño que parezca, a las pocas horas de empezar la reunión todos estábamos hablando de nuestros genitales", recuerda Anick.
Qué significa ser intersexual
Se trata de un término general que se usa para describir a las personas que nacen con variaciones biológicas en sus características sexuales que no se ajustan a las categorías típicas (masculina o femenina).
Hay muchas variaciones posibles, que involucran genitales, ovarios y testículos, patrones cromosómicos y hormonas.
Según las Naciones Unidas, alrededor del 1,7% de personas en el mundo son intersexuales.
Una de las personas que Anick conoció en Dinamarca es Pidgeon Pagonis, una activista intersexual de Chicago.
Como Anick, Pidgeon nació sin un pene o una vagina completamente formados.
Pero en el caso de Pidgeon, los cirujanos decidieron crear una vagina en lugar de un pene.
Pidgeon se crió como una niña, pero ahora usa el pronombre "élle" en lugar de "ella".
Sólo descubrió la verdad sobre su intersexualidad (y la operación a la que fue sometida cuando era niña) cuando estaba en la universidad.
Ahora piensa que estas operaciones son procedimientos cosméticos innecesarios, y argumenta que el uso de la cirugía para alterar el cuerpo de un niño intersexual sano es una violación de los derechos humanos.
"Yo diría: 'Por favor, deje que su hijo crezca como la persona intersexual que es´", dice Pidgeon.
"Deberíamos presionar a los médicos para que dejen de perfeccionar las cirugías para bebés y comiencen a perfeccionar las cirugías para los adultos intersexuales, que son los que tienen la autonomía para decidir si quieren la cirugía o no".
Anick también piensa que muchas de las operaciones que tuvo cuando era niño fueron "puramente cosméticas".
En junio de 2018 Anick ingresó en el hospital para someterse a su operación de pene.
Hace un año, los médicos tomaron la piel del brazo izquierdo de Anick para crear un falo.
Pero en esta operación el objetivo era colocar un dispositivo protésico en el pene. Gracias a esto puede tener relaciones sexuales con penetración.
Tras la operación, Anick admite sentirse un poco como un robot, y no está seguro de cómo explicará su situación a su futura pareja.
"Mi vida va a ser totalmente diferente", dice. "Siempre he evitado las relaciones por disgusto hacia mi propio cuerpo, pero he trabajado mucho para superar eso".
En agosto de 2018 Anick tuvo que someterse a otra operación para arreglar cosas que habían salido mal.
El dispositivo protésico implantado en su pene se había enrollado alrededor de uno de sus testículos, causándole un dolor insoportable.
Todavía siente dolor y tiene que estar atento a posibles infecciones, pero tiene la esperanza de que no necesitará más cirugías durante los próximos años.
En general, la operación le ha hecho mucho más feliz. Se ha apuntado a sitios web de citas y ya ha conocido a varias personas.
"Simplemente estoy tanteando el terreno", explica. "Una de mis primeras citas no fue muy positiva. Salí con una chica que me dijo que yo no era realmente un hombre. Y luego salí con un chico pero no sentí nada".
"Así estoy teniendo los mismos problemas que tiene la gente normal con las citas y las relaciones, lo que es una sensación agradable".
Anick espera que hablar sobre lo que una vez fue el mayor secreto de su vida ayude a otras personas en situaciones similares.
"Soy una persona normal, simplemente no soy común", dice. "No existe una única historia intersexual, pero espero que la mía inspire a otras personas a contar la suya".