*Les advertimos que algunas imágenes que se muestran a continuación pueden herir su sensibilidad.
Una investigación de la BBC encontró material extremo en Instagram que fomenta e idealiza desórdenes alimenticios como la anorexia y la bulimia.
La BBC halló varioshashtags (etiquetas) que les ayudan a algunos usuarios "vulnerables" a acceder más fácilmente a contenido sobre estas enfermedades.
Instagram dice que no permite contenido que fomente o promueva los trastornos alimenticios y que elimina ese tipo de material en cuanto lo detecta en su plataforma.
Sin embargo, algunos usuarios con esas enfermedades a menudo la usan para compartir experiencias y "fórmulas" efectivas para adelgazar o animarse a perder peso.
Jodie-Leigh Neil era una de ellas.
Esta joven británica dice que la red social hizo que su anorexia, de la que ahora está recuperada, fuera a peor.
"Me estaba muriendo. De hecho, si no hubiera sido por el tratamiento inmediato, no estaría hoy donde estoy", le cuenta a la BBC.
Jodie estuvo tres años combatiendo la anorexia.
En su peor momento, llegó a sobrevivir ingiriendo solamente 20 calorías diarias.
"A mi anorexia verdaderamente le encantaba Instagram", dice Jodie. "Le encantaba el material al que podía acceder".
"Las fotos eran muy gráficas, eran pura piel y huesos".
"Y la anorexia te hace creer que necesitas estar así. Instagram reforzaba eso".
Jodie dice que Instagram no causó su anorexia, pero hizo que fuera a peor.
"Estaba muy enganchada. Pasaba horas y horas navegando por ese contenido. Y eso se sumó al lado más competitivo de la anorexia. Hay imágenes que jamás olvidaré".
¿Cuáles son los signos de un desorden alimenticio?
- obsesión con la comida
- cambios en el comportamiento
- creencias distorsionadas sobre el tamaño corporal
- cansancio habitual o dificultad para concentrarse
- visitas al baño después de las comidas
- comenzar a hacer ejercicio excesivo
Fuente: Beat (ONG británica sobre trastornos alimenticios)
"Puedes ver que algunas chicas publican su peso más bajo y ese tipo de cosas. Eso hace que la anorexia quiera ponerte sobre la balanza y decirte lo gorda que estás", dice Jodie.
"Instagram agravó los efectos de la anorexia. De hecho, a veces hasta contribuyó a ella", declara la joven.
"Tiene el potencial de ser una plataforma extraordinaria y muy positiva para la salud mental. Así que debería estar haciendo más para promover eso y cambiarlo".
Su madre, Julie Neil, tiene una opinión más radical: "Por favor, cierren todos estos sitios extremos", dice ella. "Eliminen los hashtags y la negatividad que hay ahí. Debería ser un espacio seguro y feliz. Y, sin duda, no lo es".
Rose Anne Evans también padeció anorexia y está de acuerdo en que Instagram jugó un papel vital en el desarrollo de su enfermedad.
Dice que incluso cuando estaba en el hospital la plataforma le bombardeaba con recomendaciones para que viera contenido dañino.
"Recibía todas esas sugerencias con hashgtags para perder peso... Lo hacían más fácil, de cierta manera. Era tentador sumergirme de nuevo en el mundo de los desórdenes alimenticios".
Jon Goldin, del Colegio Real de Psiquiatras de Reino Unido, trata a pacientes con esa enfermedad que han usado internet para ello.
"Es muy preocupante. Esta situación es una espiral fuera de control", le dijo a la BBC. "Las redes sociales idealizan los desórdenes alimenticios".
"Un asunto complejo"
Instagram y otras plataformas en línea prohibieron algunos hashstags en 2012.
Más recientemente, la red social modificó sus filtros de contenido a raíz de esta investigación de la BBC y agregó advertencias a algunos hashtags.
Los cambios implican que si buscas ahora #anorexia o #bulimia leerás el siguiente mensaje: "¿Podemos ayudarte? Los posts con las palabras o etiquetas que estás buscando a menudo fomentan comportamientos que pueden causar daños e incluso la muerte".
"Si estás pasando por una situación difícil, nos gustaría ayudarte".
Hay cerca de 6 millones de posts para el hashtag #anorexia (y miles de búsquedas relacionadas).
También hay etiquetas con contenido positivo, como #anorexiawarrior (guerrero de la anorexia) o #anorexiarecover (recuperación de la anorexia), en donde algunas personas con el trastorno comparten imágenes de superación.
En otra investigación reciente, la BBC halló imágenes y hashtags vinculadas a autolesiones y suicidio infantil en la red social, y recogió el testimonio de Ian Russell, el padre de una niña de 14 años que dijo que Instagram "ayudó a matar" a su hija.
"Es un tema muy complicado", explicó Steve Hatch, director para Europa del Norte de Facebook (la compañía a la que pertenece Instagram).
"Creo que todavía hay cierto contenido que no debería estar en Instagram", le contó a la BBC Ysabel Gerrard, una socióloga de la Universidad de Sheffield, en Reino Unido.
También preocupa cómo el algoritmo de la red social recomienda cierto contenido.
Tara Hopkins, directora de políticas públicas de Instagram, le dijo a la BBC que la plataforma no favorece contenido que promueva los desórdenes alimenticios, pero insistió en que es un asunto complejo.
"Mucha gente que se está recuperando de trastornos alimenticios usa Instagram de forma positiva para apoyarse a sí mismos y a los demás", añadió.
Es el caso de Jodie. La joven todavía usa Instagram, pero ahora utiliza su cuenta para ayudar a otras personas que sufren anorexia.
Dice que lo hace para que otros vean "su trayectoria positiva" y "lo lejos que he llegado".
"Me di una segunda oportunidad para vivir y la estoy aprovechando al máximo".