Los homenajes a Ludwing van Beethoven por los 250 años de su nacimiento se abrieron el lunes por la noche con una ceremonia en la Ópera de Bonn. La ministra de Cultura, Monika Grütters (CDU), enfatizó el poder intemporal que tenía el trabajo del compositor, nacido en esta ciudad en diciembre de 1770. "Hasta el día de hoy, su música toca, mueve, inspira y conecta a las personas a través de todas las fronteras", dijo.
Las celebraciones, que se extenderán por toda Alemania, cuentan con un presupuesto de 42 millones de euros, asumidos por el gobierno federal, el estado de Renania del Norte-Westfalia y la región de Bonn. Se planean alrededor de mil conciertos, representaciones de ópera, exposiciones y conferencias.
La música que escribió Beethoven atrapa a la gente, dijo el primer ministro de Renania del Norte-Westfalia, Armin Laschet (CDU). Grütters dijo que el programa abarca diferentes enfoques: "incluso para aquellos que piensan en Beyoncé, en lugar de Beethoven cuando se habla de una 'megaestrella' de la música".
Desde hoy está también en el Museo Federal de Arte (Bundeskunsthalle) de Bonn, abierta al público, hasta abril del año que viene, la exhibición central "Beethoven - Mundo.Ciudadano. Música". La muestra realiza un recorrido por la trayectoria vital del genio, vinculándola con algunas de sus obras clave. Otras exposiciones, así como una ampliación de las instalaciones de la casa natal del artista en Bonn, complementan esta muestra.
Quizá el más original homenaje tendrá lugar el próximo 28 de abril en Bonn, donde se interpretará por vez primera una versión de la conocida como "sinfonía inacabada" de Beethoven, su Sinfonía nº 10 -de la que sólo existen bosquejos- completada íntegramente mediante inteligencia artificial.