Millie Mclay sufrió un accidente luego de estar andando a caballo en el parque Richmond Park de Londres en Reino Unido. El animal resbaló y cayó encima de ella y tras intentar levantarse volvió a golpear a la mujer.
Producto de lo anterior, su pierna se partió en dos por lo que fue trasladada de urgencia a un recinto hospitalario donde le señalaron que tenía una fractura expuesta de tibia-peroné. Los médicos pusieron la pierna en su lugar y le aplicaron yeso.
Luego de dos semanas internadas por el grave accidente, el médico le informó a Millie que debería utilizar un marco estabilizador que protegería su pierna, debido a que había riesgo de que sufriera una infección. Le precisó que no podía tocar la zona ni tampoco depilarse durante el tiempo que dure su completa recuperación.
Pasaron las semanas y la mujer de 23 años comenzó a viralizar en sus redes sociales el proceso de recuperación, ante lo cual las reacciones por el vello en su pierna no se hicieron esperar. "Nunca pensé que el factor de impacto de mis videos podría llegar a ser ese poco de pelo en la pierna", comentó.
En esa línea, agregó que "no puedo entender que la gente lo encuentre tan repugnante cuando es completamente normal. Los médicos han dicho que si me afeito, pequeños trozos de vello podrían entrar por los orificios, lo que podría entrar en mi hueso. Todavía tengo el riesgo constante de sufrir una infección profunda en los huesos y tendrían que amputarme la pierna".
Sobre la repercusión que han tenido sus videos en internet, Millie Mclay explica que "los comentarios no me molestaron. Me hicieron darme cuenta de por qué me afeito y me di cuenta que tal vez me tendría que dejar crecer el vello corporal. ¿Es que para quién lo estoy haciendo? Creo que no hace falta decir que la salud es más importante que la apariencia", aseguró.
Fue tal la reacción a sus videos, que la joven aumentó drásticamente sus seguidores de 20 personas a más de seis mil. Si bien en un comienzo recibió comentarios negativos, rápidamente muchas personas empezaron a apoyarla.
El aparato protector fue puesto en el mes de enero y actualmente aún es utilizado por Millie. "Espero que pronto me lo puedan quitar", aseguró la joven a quien le señalaron que su pierna podría ser amputada en caso de infección.