Poco a poco, varios países han flexibilizado sus políticas de confinamiento para dar paso a una "nueva normalidad" y convivir con el coronavirus mientras se trata de controlar sus contagios con medidas de prevención como distanciamiento social, uso de mascarillas y teletrabajo.
Mientras tanto, el impedimiento de desplazarnos puede ocasionar ansiedad por estar encerrados, sin poder cumplir con nuestras actividades al aire libre o estar con nuestros seres queridos.
No solo ha afectado a las personas, sino que también a las mascotas que no han podido realizar sus paseos habituales, por ejemplo.
Y cuando tienen la posibilidad, pueden tener momentos emotivos como lo ocurrido a una perrita llamada Samantha de Ontario en Canadá, quien no pudo controlar su alegría al ver a lo lejos a su compañera de juegos Baldur.
El registro se popularizó en las redes sociales y el descontrol de la mascota al divisar a su amiga.
“Hace tres años, cuando Samantha y yo nos mudamos a Hamilton, Baldur fue su primera amiga, rápidamente se hizo como su alma gemela”, señaló su dueña a un medio local.
Ambas mascotas jugaban todas las tardes hasta que la cuarentena entró en rigor por lo que tuvieron que confinarse en sus hogares.