Una de las presencias más comentadas en la pasada boda real, fue la de Chelsy Davy, ex novia del príncipe Harry, con quien mantuvo una relación hasta 2010.
Lo cierto, es que tras terminar la relación, mantuvieron una "amistad" en donde varias veces se les vio juntos, manteniendo gestos de cariño muy notorios entre ambos. Por esto, no quedaba claro que clase de relación tenían ambos.
Debido a lo anterior, el príncipe Harry, días antes de su matrimonio con Meghan Markle, decidió llamar a Davy para terminar con esta amistad, cerrando un capítulo que aún quedaba abierto entre ambos.
Según información de Vanity Fair, a Davy le afectó mucho esta situación, tanto que terminó llorando y por poco casi se ausenta de la boda real.
"Se trató de una despedida, en la que ambos reconocieron que él había tomado otro rumbo", sotuvo una fuente citada por el medio y agregó que "Chelsy terminó muy conmovida con todo esto. Estaba llorando y casi se ausenta a la boda. Finalmente fue. Antes le había prometido a Harry que nunca haría algo para arruinar la fiesta".
Sin embargo, la ex novia de Harry si asistió a la ceremonia, cuyo paso no pasó inadvertido, siendo tema de conversación en redes sociales por su atuendo y por su presencia.