Dylan Askin, un niño de dos años con cáncer, sorprendió a su familia al despertar de un coma momentos después de que sus padres tomaran la decisión de apagar el respirador que lo mantenía con vida.
Su historia comenzó en la Navidad del 2015 cuando tuvo dificultades para respirar por lo que su familia lo llevó al hospital. Ahí fue cuando encontraron que su pulmón había colapsado.
Los doctores no pensaban que Dylan pudiera ganarle a esta enfermedad. El menor tenía el 80% de sus pulmones cubiertos de quistes. Sin embargo, momentos antes de que los doctores desconectaran su soporte vital Dylan despertó y comenzó a recuperarse de a poco para luego ser enviado a su casa justo en Semana Santa. "Creo firmemente que Dylan fue nuestro milagro de Pascua", dijo Kerry, madre del niño.
"No soy una persona muy religiosa, pero en este caso supe que se trataba de un milagro de Pascuas. Cuando le conté lo que había pasado a mi hijo mayor, él me dijo: ‘Es como Jesús’, porque era lo que además estaba aprendiendo en la escuela en ese momento", agregó Kerry.