La historia de Iron Maiden con Chile es bastante estrecha. Los británicos arribarán a nuestro país en octubre, donde se presentarán en el Estadio Nacional el martes 15, concierto que ya agotó sus entradas y que los obligó a agendar un nuevo concierto, esta vez en el Movistar Arena.
Sin embargo, hace 27 años, la Iglesia Católica ejerció presión para que el grupo británico de heavy metal no se presentara por primera vez en el país... y lo lograron.
Un hecho que generó revuelo mundial, pues desde el Gobierno de Patricio Aylwin tildaron de "satánicos" a los dueños de "The number of the beast".
Humberto Lagos fue el asesor religioso del mandato de Aylwin y, en ese entonces, apuntó que la "Doncella de Hierro" "promueve conductas relacionadas con el satanismo, eso es una evidencia incontestable. Basta mirar algunas letras".
Luego de casi tres décadas, Lagos abordó la figura de la legendaria banda en entrevista con La Cuarta.
"El cardenal (Jorge) Medina tuvo conversaciones para impedir la presentación" señaló en torno a las trabas que se colocaron por parte de la Iglesia Católica y detalló que desde el Gobierno "hubo críticas de orden político hacia la banda, en cuanto que jamás hicieron un gesto para criticar la dictadura militar, así como otros grupos, en los '80".
Sobre si sigue pensando si son satánicos, aseguró que "¡jamás! Tienen algunas letras de esa índole".
"No me gustan", añadió y recalcó que "cuando están en vivo provocan, en determinado momento, alteraciones de la personalidad".
Y ante la consulta sobre si estará en el Estadio Nacional o en el Movistar Arena en octubre, reveló que "si me regalan la entrada, los iría a ver".
