Como suele ocurrir, lo más atractivo en la vida es aquello que encontramos prohibido, secreto.
Y cuando hablamos de viajar, nos sentimos atraídos por aquellos lugares que se encuentran fuera del alcance del turista común.
Para descubrir algunos de estos seductores lugares visitamos el sitio en internet sobre preguntas y respuestas Quora.
La bóveda mundial de semillas en Svalbard, Noruega
Imagínate por un segundo que el planeta cambia dramáticamente como consecuencia de un gigantesco desastre natural: la población mundial es arrasada, la infraestructura devastada y las fuentes de alimento son diezmadas.
El único objetivo de los sobrevivientes: reconstruir el mundo.
¿Dónde comenzar frente a semejante escenario de apocalipsis hollywoodense? La respuesta está en Svalbard, Noruega, último bastión de la humanidad contra una crisis alimentaria mundial.
La bóveda se ubica a 120 metros dentro de una montaña de arenisca en la isla de Spitsbergen, en el remoto archipiélago ártico de Svalbard, a 1.300 kilómetros del Polo Norte.
La instalación es el banco de semillas más vigilado y mejor custodiado de la Tierra.
Desde febrero de 2008 esta cripta protege las cosechas del planeta contra una catástrofe mundial.
En su interior se guardan 250 millones de semillas provenientes de todas partes del mundo envueltas en paquetes recubiertos por cuatro capas para resguardarlas de la humedad o falla de los equipos de mantenimiento.
Hay una razón por la cual los científicos escogieron Spitsbergen: la isla no está en una zona de actividad tectónica, preserva el permahielo del terreno (el suelo está congelado pero no cubierto por nieve o hielo) y se encuentra a 130 metros sobre el nivel del mar, lo cual garantiza que el sitio permanecerá seco –y las semillas seguras- incluso si el calentamiento global produce un derretimiento de glaciares.
Es un sitio tan seguro que los académicos estiman que las semillas pueden sobrevivir ahí por cientos, si no, miles de años.
Desafortunadamente, no hay paquetes vacacionales con esta isla como destino turístico. Solo puedes visitar la bóveda si eres un investigador o agricultor.
Ni´ihau, Hawái
Ni´ihau es la isla deshabitada más pequeña de Hawái. Y por eso puede parecer un sitio ideal para un escape tropical, con sus palmeras, su fauna en peligro de extinción y la ausencia casi total de turistas.
Pero la realidad es otra. Sus 180 kilómetros cuadrados se encuentran vedados al ingreso de turistas.
La isla fue vendida por Kamehameha, rey de Hawái, en 1863, a la familia Robinson, unos adinerados terratenientes. Desde 1915 se encuentra cerrada al público.
La vida en esta remota isla es inusual: tiene unos 130 habitantes, todos son indígenas hawaianos, no pagan renta, no hay vías pavimentadas, ni teléfonos, cañerías, tuberías de agua o tiendas.
El transporte se realiza a lomo de caballo o en bicicleta, paneles solares generan la electricidad, y las provisiones llegan en barcazas provenientes de Kaua´i, otra isla cercana donde los niños van a la escuela.
Aunque es pequeña, la isla ha sido escenario de incidentes que le han puesto un lugar en la historia.
Fue en Ni´ihau donde en 1941 un piloto japonés se estrelló luego del ataque a Pearl Harbor, aterrorizando a los habitantes por una semana.
En 1944 el presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt consideró esta isla como posible sede para las oficinas principales de las Naciones Unidas.
Este pequeño territorio se encuentra hasta el día de hoy fuera del alcance del público. Solo puede visitarse si alguien de la isla te invita, y la Guardia Costera vigila permanentemente la zona para evitar que extraños se acerquen por mar o tierra.
Dicho eso, siempre hay maneras para que un astuto viajero pueda echarle una mirada a esta isla prohibida.
En 1987 un operador de turismo que vive en la isla ofreció un tour para en sobrevolarla en helicóptero o para acercarse en bote.
La base de la Real Fuerza Aérea en Menwith Hill, Inglaterra
Si James Bond tuviera un búnker secreto, sería esta instalación.
Se dice que la base de la Real Fuerza Aérea en Menwith Hill, North Yorkshire, Inglaterra, es la estación de monitoreo electrónico más grande del mundo,responsable de interceptar comunicaciones en el mundo para procesar información de inteligencia para Estados Unidos y Reino Unido.
La base ultra secreta fue construida en 1954 para monitorear las comunicaciones de la Unión Soviética durante la Guerra Fría.
Nadie sabe con certeza cómo funciona la base en estos días, aunque supuestamente se encuentra enfocada en investigar las acciones de terrorismo internacional y tráfico de drogas.
Para algunos expertos también sirve como estación en tierra para la operación de los satélites de Estados Unidos.
Y se cree que guarda vínculos con ECHELON, conocido como Cinco Ojos, la red de espionaje al estilo James Bond integrada por Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Reino Unido y Estados Unidos.
Como es de esperar, no hay buenas noticias aquí para los fanáticos de 007 y John Le Carré: no hay manera de ingresar a la base para conocer la vida que se desarrolla dentro de sus paredes.
Los únicos que tienen acceso son miembros de la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos y de ECHELON.
El Archivo Secreto del Vaticano, Vaticano
El Archivo Secreto del Vaticano no es una biblioteca ordinaria. Contiene documentos personales de todos los papas desde el siglo VIII.
Estuvo cerrado a toda persona ajena al Vaticano hasta 1881, y desde entonces mantiene sus documentos ultra secretos bajo llave, pero con acceso a connotados académicos que logren pasar el largo y complicado proceso de aplicación.
La aplicación debe incluir información personal sobre el académico, el propósito de su investigación y una carta de presentación firmada por un instituto de investigación o universidad calificada en investigaciones históricas.
Incluso si un profesor se le concede acceso a estos archivos –considerados propiedad personal del papa-, la cantidad de documentos es de por sí un obstáculo para cualquier investigador: los papeles están distribuidos en un área de 85 kilómetros de estantes que almacenan más de 35.000 volúmenes.
Entre los tesoros escondidos en los archivos está la bula papal de León X, excomulgando a Martín Lutero y anunciando la Reforma; las transcripciones del juicio a los Caballeros Templarios en el siglo 15; cartas del multifacético artista Miguel Ángel del siglo 16; correspondencia de Abraham Lincoln del siglo XIX; y la bula papal fechada en 1198 convocando a la Cuarta Cruzada por la Tierra Santa.
Área 51, Nevada
Como dice el refrán popular: lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas.
Y lo mismo puede decirse de Área 51, la secreta instalación ubicada a 129 kilómetros al norte.
Área 51 fue utilizada primero como una base militar durante la era de la guerra de Vietnam, destinada a proteger documentos de estado altamente confidenciales.
¿Qué pasa en esta instalación? La Agencia Central de Inteligencia no da detalles sobre el uso de esta base, lo cual ha originado incontables teorías conspirativas a su alrededor.
¿Es el lugar donde le hacen la autopsia a alienígenas encontrados en naves espaciales que se estrellan en la Tierra? ¿Es una fábrica de armas laser? ¿Es un lugar de pruebas de aviones secretos?
Probablemente nunca sabremos la verdad al respecto.
Todo lo que ocurre en Área 51 es considerado ultra secreto y está prohibido el acceso al público. Aunque mucha gente lo intente.
Una isla que es un enjambre de serpientes
Visitar la Isla de Queimada Grande en Brasil está prohibido.
Esto se debe a que la isla, ubicada 33 km frente a la costa del estado de Sao Paulo, es un enjambre de serpientes venenosas que derriten la carne humana.
La isla Queimada Grande (también llamada isla de las Serpientes) se encuentra frente a la costa de Brasil, en el océano Atlántico. Es el único hogar de la víbora venenosa de punta de lanza dorada (Bothrops insularis), ahora en peligro de extinción.
Según algunas estimaciones, hay una serpiente – de esta y otras especies- por cada metro cuadrado de la isla.
En el lugar no hay presencia humana. La hubo hasta las primeras décadas del siglo XX para operar un faro, el que luego fue automatizado.
La isla está cerrada al público para proteger tanto a las serpientes como a las personas y en 1985 fue declarada área relevante de interés ecológico. De hecho, la Marina de Brasil prohíbe a los civiles entrar en la isla. Solo científicos reciben permiso de vez en cuando para visitar el lugar.