Hace un par de días vimos que en algunos tribunales en China estaban empezando a usar aplicaciones impulsadas por Inteligencia Artificial para la resolución de casos sencillos. Ahora lo vemos en un país más cercano, en Colombia, donde un juez utilizó, por primera vez, la famosa IA ChatGPT para redactar una sentencia sobre el caso sobre el derecho a la salud de un niño autista.
"Es una ventana inmensa, hoy puede ser ChatGPT, pero en tres meses puede ser cualquier otra alternativa que permita facilitar la redacción de textos y que el juez se apoye en ellos, no con el objetivo de que lo reemplacen", comentó el juez del caso, Juan Manuel Padilla, a la radio colombiana Blu Radio.
El caso en cuestión se trata del pedido de una mamá para que su hijo autista fuera exonerado del pago de citas médicas, terapias y transporte hacia los centros de salud porque no cuentan con los recursos económicos para costear todo lo que involucra su tratamiento.
A beneficio de la familia, el juez falló a favor del menor y en la sentencia revela que le preguntó a la IA de ChatGPT para sustentar su decisión y redactar el texto. "Los jueces no somos tontos. Por el hecho de hacerle preguntas al aplicativo no dejamos de ser jueces, de ser seres pensantes", explica.
No obstante, a pesar de que ChatGPT solo "apoyó" la decisión inicial de juez, el hecho de ser utilizado en la justicia fue criticado en redes sociales, por un profesor de la Universidad del Rosario, Juan David Gutiérrez. "Como ocurre en otras IA en otros ámbitos, baja la narrativa de una supuesta eficiencia se pone en riesgo los derechos fundamentales", sentenció.