Desde el pasado mes de noviembre entró en vigencia una orden ejecutiva que obliga a que todas las empresas con más de 100 trabajadores deben tener a sus empleados vacunados contra el Covid-19 antes del 18 de enero, para poder seguir funcionando con normalidad en Estados Unidos.
Si bien la orden no ha tenido respaldo por parte del Senado y los Tribunales, ahora mismo se encuentra en un limbo legal, pero Google decidió hacerla cumplir por su cuenta.
Así lo informa la cadena de noticias CNBC, quienes tuvieron acceso a un documento interno de la compañía que revela que Google ha decidido ponerse serio con el tema. Los trabajadores tienen hasta el 3 de diciembre para presentar su certificado de vacunación.
En caso de no hacerlo, la compañía pide al trabajador que presente una solicitud de exención por motivos médicos o religiosos, lo que será analizado con atención. En caso de que la alegación no sea válida, el trabajador deberá vacunarse antes del 18 de enero.
De mantener la posición negativa, los empleados se enfrentan a una suspensión administrativa por 30 días, donde además dejarán de recibir su sueldo. Transcurrida esta, la empresa puede cursar una baja administrativa de 6 meses, plazo tras el que pueden despedir a cualquier trabajador de forma definitiva.
“Esperamos que todos los puestos de trabajo cumplan con el objetivo de esta ley ejecutiva. Cualquiera que entre en una instalación de la compañía debe estar completamente vacunado o disponer de un lugar específicamente dispuesto para que pueda desempeñar su trabajo”, señala el documento interno de Google.
El realizarse test PCR de manera frecuente no es una alternativa viable en este caso, en palabras de la propia compañía, aunque si contemplan una alternativa. Una persona no vacunada podrá seguir trabajando si encuentra un puesto que le permita hacer teletrabajo a tiempo completo.
