El futuro de la vida en la Tierra no está garantizado por nadie, pero tampoco hay evidencia científica que respalde la idea del fin del mundo en un sentido catastrófico o apocalíptico.
Sin embargo, el destino de la humanidad y del planeta está influenciado por una variedad de factores, incluidos los cambios climáticos, los avances tecnológicos, los riesgos de catástrofes naturales y la posibilidad de conflictos, que podrían eventualmente acabar con la vida en la Tierra y desencadenar el fin del mundo.
Además de lo anterior, en el universo la Tierra es simplemente un planeta más de los miles que existen y, en consecuencia, tampoco está libre de ser afectado por los miles de fenómenos astronómicos que existen, entre ellos, el impacto de un asteroide o cometa.
Estudio revela cuál será el destino de la Tierra
Un reciente estudio publicado en la revista mensual de la Real Sociedad Astronómica, realizado por investigadores de la Universidad de Warwick, en Inglaterra, reveló que el Sol sería el culpable de acabar con la vida en la Tierra dentro de cinco mil millones de años cuándo se convierta en una gigante roja que terminará por engullir a algunos planetas del sistema solar, incluido el nuestro.
Cabe destacar que, según la Sociedad Española de Astronomía, las gigantes rojas son "estrellas muy grandes y frías, su tamaño puede llegar a unos pocos cientos de veces el radio del Sol". Después de esto, el Sol continuaría su proceso natural hasta ser una enana blanca, es decir, un cadáver estelar.
Asimismo, el portal especializado Es de Ciencia indica que existe una pequeña posibilidad de que la Tierra logre escapar de esto, pero que "no contaría con las condiciones necesarias para la vida, dada la radiación y las temperaturas, lo que terminaría con todo lo que esté sobre ella".