En Corea del Sur hicieron un robot camaleón capaz de replicar al animal y lograron con éxito un camuflaje de nivel militar. El logro podría revolucionar la industria del camuflaje militar.
El camuflaje es un gran aliado a la hora de utilizar el espionaje para la recolección de información. Este roboto camaleón tiene una particularidad y es que tiene un funcionamiento totalmente eléctrico. Su transición a la hora de cambiar colores es impresionante, es casi de forma instantánea.
En el reino animal, existe un centenar de especies crípticas, esto quiere decir que pueden cambiar de color para mimetizarse con el entorno que les rodea. Un ejemplo de ello son los pulpos y sepias, auténticos maestros del camuflaje en el fondo del mar. Pero si hablamos de tierra firma es indiscutible que el artista del camuflaje es el camaleón.
El robot camaleón que desafía a la naturaleza
La tecnología utilizada es a partir de sensores de color, siendo pequeños calentadores hechos de nanocables de plata y materiales termocrónicos, que cambian de color cuando se exponen a diferentes temperaturas. Esto lleva al robot camaleón crear múltiples patrones de alta resolución que cambian rápidamente.
El cambio de color depende de la temperatura, por lo tanto, su adaptación a lugares con fríos extremos aún no están completada, pero se espera que a futuro se pueda concretar. El equipo señala según lo dicho por Seung Hwan Ko, profesor de ingeniería térmica en la Universidad Nacional de Seúl y uno de los autores del estudio, el invento no solo tienes fines militares, ya que esta tecnología puede tener un impacto más amplio, ya sea en el mundo del transporte con automóviles que adapten sus colores para destacar