“Prohibidos los parlantes. Playa libre de contaminación acústica. Zona de descanso. Escuchemos el sonido de la naturaleza. Si trae parlantes, sólo con audífonos”, dice un cartel instalado en la Playa La Virgen de la localidad de Caldera, en el norte del país.
Esta imagen difundida en las redes sociales no ha tardado en causar polémica, generando múltiples reacciones entre vecinos, turistas y autoridades de la zona, quienes se han dividido entre los que apoyan la medida y los que critican la medida, argumentando que las playas son espacios de uso público.
Lo cierto, es que el cartel está instalado bajo una ordenanza municipal de Caldera desde el año 2018, pero tras las críticas surgidas, las autoridades salieron a responder.
La alcaldesa de Caldera, Brunilda González, habló con Meganoticias explicando que “esto está basado en la norma chilena 1.619 de ruidos molestos y en el decreto supremo 253 del Ministerio de Salud, que establece los decibeles que están permitidos durante el día y la noche”.
En específico, no se permiten ruidos en el día que superen los 55 decibeles y las personas que no respeten la normativa podrían arriesgar multas que van desde los $163 mil hasta los $272 mil pesos chilenos.
