Nada en el universo es eterno, ni siquiera un planeta, quienes pueden llegar a su fin de distintas maneras, siendo una de ellas: devorados por una estrella. Así lo captó un grupo de astrónonos, quienes identificaron a la estrella ZTF SLRN-2020 con características similares al Sol, a unos 15 mil años luz de distancia de la Vía Láctea, tragarse a un planeta del porte de Júpiter.
Es sabido por los expertos que cuando una estrella se convierte en una gigante roja es capaz de comerse a los planetas que giran alrededor de ella. De hecho, predicen que el Sol lo hará en unos 5 mil millones de años, quitándole la vida a Mercurio, Venus y, en el peor de los casos, a la Tierra.
Ahora, por primera vez, queda en envidencia. Kishalay De, becaria postdoctoral en el MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts) y autora principal del hallazgo y posterior estudio, asegura que "la confirmación de que las estrellas similares al Sol engullen los planetas interiores nos brinda un eslabón perdido en nuestra comprensión del destino de los sistemas solares, incluido el nuestro".
El hallazgo fue posible gracias al Zwicky Transient Facility (ZTF, por sus singlas en inglés). Es una herramienta de la Fundación Nacional de Ciencias que, a través del Telescopio Samuel Oschin de Caltech, en el Observatorio Palomar, de San Diego, analiza el cielo todas las noches.
Se percataron, entonces, que la estrella brillaba como nunca antes y se iba desvaneciendo. Llegaron a pensar que se trataba de una explosión de nova, evento astronómico que ocurre cuando una estrella enana blanca roba materia de otra.
"Había estado buscando estrellas en erupción llamadas novas. Pero los datos de Keck (un observatorio en la cima de Maunakea en Hawái) indicaron que la estrella no estaba encendiendo gas caliente como se esperaba para las novas. No pude entenderlo“, continúnan.
De esa manera, se dieron cuenta que la estrella estaba brillando tanto con luz óptica e infrarroja, que indica la presencia de polvo. Así que solicitaron permiso para usar el telescopio espacial NEOWISE de la NASA para entender lo que estaba pasando. Descubrieron, entonces, que la estrella se estaba apoderando del planeta.
“A medida que la estrella se expandía, su atmósfera exterior finalmente rodeó al planeta. El arrastre de la atmósfera redujo la velocidad del planeta, reduciendo su órbita y eventualmente enviándolo debajo de la superficie visible de la estrella, como un meteorito que se quema en la atmósfera de la Tierra”, explica la NASA.
El video que se presenta a continuación es solo una animación de lo que los astrónomos identificaron:
