"Me da vergüenza" afirmó la diputada Ximena Ossandón luego que se conociera que uno de sus hijos había participado en las fiestas clandestinas realizadas en Cachagua y que desencadenaron una serie de contagios en el balneario.
Tras la difusión de audios e imágenes relativas a los eventos masivos en el balneario, el gobierno anunció una querella contra los organizadores.
Ossandón -quien en abril de 2020 pidió decretar ley seca durante la pandemia- confirmó que en realidad fueron dos de sus hijos los que asistieron a la fiesta, y ambos fueron confirmados como casos positivos de coronavirus.
"Tengo sentimientos encontrados; nadie dijo que la maternidad era fácil. A uno le duele el alma, porque si no fuera hijo mío no estaríamos hablando de esto en este matinal", afirmó en CHV.
Y es que, "independiente de que la mamá sea diputada, hay una responsabilidad de elite, y eso es cierto", dijo.
¿Usted sabía que ellos estaban ahí y que andaban en fiestas?, se le consultó respecto de sus hijos. "Sí, y por eso me da vergüenza", respondió.
Ossandón detalló que se encuentra en cuarentena de manera preventiva.