La presidenta interina de la Democracia Cristiana (DC), Myriam Verdugo oficializó su renuncia a la directiva del partido en la Junta Nacional de la DC, instancia marcada por la profunda crisis política tras la derrota en las pasadas elecciones presidenciales.
"En este cuadro de dolor, derrota, amargura, de críticas cruzadas, esta mesa acordó presentar ante ustedes, esta Junta Nacional, su renuncia para que se inicie un proceso de renovación partidaria", señaló Verdugo.
La líder de la falange aprovechó la ocasión para realizar una dura autocrítica al partido, afirmando que "claramente fallamos todos. De nueve integrantes de la mesa quedamos seis, tras vivir un proceso difícil y doloroso para a cada uno de nosotros con varios episodios críticos y después de una derrota electoral".
Para Verdugo, la DC hoy debe enfrentar una "crisis electoral, política y de respeto interno", razón que justificaría la fuga masiva de militantes: entre enero y noviembre de 2017, más de 3 mil personas se desligaron del partido.
Además, afirmó que la creencia de algunas voces de la falange de que "el partido se situaba muy a la izquierda, otros, que se había derechizado" hacía "evidente nuestra falta de definiciones e incapacidad de resolver la diferencias".