Cuatro días alcanzó a estar en el cargo el ministro de las Culturas y las Artes, Mauricio Rojas, luego que se viera obligado a presentar su renuncia por los desafortunados dichos emitidos en un libro publicado el año 2015, donde calificó al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos como "un montaje".
En el libro titulado "Diálogo de Conversos", escrito junto al actual canciller Roberto Ampuero, Rojas señalaba que "más que un museo (...) se trata de un montaje cuyo propósito, que sin duda logra, es impactar al espectador, dejarlo atónito, impedirle razonar (...) Es un uso desvergonzado y mentiroso de una tragedia nacional que a tantos nos tocó tan dura y directamente".
La polémica estalló durante el fin de semana tras una entrevista en el diario La Tercera en que Rojas explicó que los dichos "están sacados de entrevistas anteriores, no sé exactamente de cuándo son, y no reflejan mi posición actual. Primero, nunca he minimizado las violaciones de derechos humanos que se cometieron en Chile. Eso yo lo he condenado siempre, fue absolutamente inaceptable fueron violaciones sistemáticas y terribles que me afectaron muy cerca: mi madre estuvo en Villa Grimaldi, por lo tanto, tengo una cercanía directa con eso. Y hoy toda expresión que nos divida, que nos confronte, es para mí algo que no tiene lugar".
Pese a esto, y a un mensaje que el ahora ex ministro publicó en Twitter cuando comenzaron a alzarse las voces que pedían su salida, en el que reiteraba que "nunca he minimizado ni justificado las inaceptables, sistemáticas y gravísimas violaciones de los derechos humanos ocurridas en Chile", la polémica estuvo lejos de acabar.
Actores y actrices se negaron a participar en actos con Rojas
A las críticas políticas recibidas, se sumaron las de las agrupaciones de familiares de detenidos desaparecidos y de miembros del mundo de la cultura, como actores y actrices que aseguraron que no asistirían a los actos presididos por el ministro Rojas en repudio a sus dichos.
Por su parte, Carlos Peña, miembro del directorio del Museo de la Memoria aseguró la mañana de este lunes que esos dichos son "errores indignos del cargo" de ministro de Estado, apuntando a que además de decir que hubo un cambio de idea, debería ofrecer disculpas a los familiares de detenidos desaparecidos y víctimas de la dictadura.
