26 meses después de asumir la dirección del Sename, Susana Tonda decidió renunciar al cargo en la mañana de este lunes.
La decisión se conoce luego de una semana donde el servicio estuvo en el debate público producto del convenio de colaboración que firmó con la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), que derivó en denuncias en contra de la organización por parte de parlamentarios y la Defensoría de la Niñez.
Luego de días de controversia, el Ministerio de Justicia finalmente decidió pedirle al Sename que dejara sin efecto el polémico convenio.
Esta mañana, Tonda confirmó su dimisión en un mail que envió a funcionarios del Sename. En el correo justifica su decisión apuntando al ministerio que dirige Hernán Larraín. "Dado los acontecimientos de los últimos días, me ha quedado claro que no cuento con la confianza de mi jefatura directa, lo cual es imprescindible en un cargo como éste, más considerando los tremendos desafíos en los que estamos empeñados", señala.
"Entiendo que es posible tener opiniones distintas, incluso cometer errores, pero dudar o insinuar una duda o insinuar una duda pública por pequeña que sea, respecto a la intención de la búsqueda permanente del bien superior de niños y niñas, sencillamente no me ha sido posible aceptar", sentencia.