“Después de 10 años de estar planteándole a Chile que quieren desmantelar la Constitución, que quieren una Nueva Constitución, se presenta un proyecto que no dice nada. Si el gobierno quiere cambiar la Constitución yo le recomiendo que presente un proyecto con sus ideas”. Con estas palabras, el ex Presidente Sebastián Piñera salió a reiterar este miércoles sus cuestionamientos hacia el proceso ideado por el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, quien ya firmó el proyecto de ley que establece una Convención Constitucional como el mecanismo para modificar la Carta Fundamental.
Las críticas de Piñera, que van en línea con las planteadas por dirigentes de Chile Vamos que ya anunciaron que rechazarán dicha iniciativa en el Congreso, se dan en paralelo al trabajo programático en esta materia que se encuentra realizando un grupo de profesionales y políticos ligados al ex Mandatario.
De hecho, según confirman en el piñerismo, durante este jueves está presupuestado que el comité ejecutivo de su comando aborde la materia, cita en la que podría estar el propio Piñera. Esto, según dicen en la oposición, considerando en primer lugar que el tema constitucional no será un eje central del programa y, en segundo, que no se pretende realizar una modificación estructural a la Carta Fundamental ni tampoco ceñirse al denominado Proceso Constituyente iniciado por La Moneda.
Con esto en mano, dentro de los grupos programáticos de Piñera se estableció el equipo centrado en la modernización del Estado e institucionalidad. Dicha comisión, que ya se ha reunido anteriormente, es liderada por el ex ministro Cristián Larroulet y el ex contralor Ramiro Mendoza. A estos se suman el ex subsecretario de Minería, Francisco Orrego; la ex integrante del “segundo piso” de Piñera, Fernanda Garcés; y Sebastián Soto, ex jefe de la División Jurídico Legislativa de la Segpres.
De ese equipo, según cuentan en la oposición, se desprenderá una subcomisión centrada exclusivamente en materias constitucionales, la cual estará a cargo de Soto y será integrada por los también abogados Arturo Fermandois, Gastón Gómez, Héctor Mery y Ángela Vivanco, y los parlamentarios de Chile Vamos miembros de las comisiones de constitución del Congreso: los senadores Alberto Espina y Hernán Larraín y los diputados Cristián Monckeberg, Arturo Squella y Juan Antonio Coloma.
Y si bien dicho grupo aún no concreta su primer encuentro, cosa que debería darse durante abril, desde el entorno de Piñera señalan que uno de los insumos principales que serán considerados para construir el planteamiento del ex Presidente serán las 80 propuestas elaboradas por el equipo constitucional de Chile Vamos, documento que considera pasar de un “Estado netamente subsidiario” a uno “solidario y subsidiario”.
Según señalan en la oposición, y según ha dicho el propio Piñera, este grupo buscará establecer propuestas de cambio a la Constitución, eso sí, no se pretende proponer una modificación sustancial. Más bien, comentan en Chile Vamos, la idea es apuntar a una “evolución” de la Carta Fundamental.
“Nosotros hemos sido siempre partidarios de la evolución constitucional”, dijo a t13.cl el senador Espina y agregó: “Esta Constitución Política ha tenido en democracia 37 leyes que la han cambiado. Por lo tanto no es verdad que esta sea una Constitución inamovible que no se pueda tocar. Se puede modificar y la manera de hacerlo son los cauces institucionales”.
“Lo lógico es la evolución de la Constitución, esa discusión de que hay que tener una nueva, como si con eso se resolvieran los problemas, es la demagogia que ha hecho la teoría de este gobierno”, enfatizó.
Y en el mismo sentido añadió que “este proceso constituyente de la Nueva Mayoría no tiene ningún fundamente. Lo que la Nueva Mayoría quiere no es mejorar la Constitución, lo que quiere es usar este tema en un año electoral como una herramienta para engañar a la ciudadanía”.
