“¿Están los votos?”, preguntó un dirigente oficialista en la reunión que sostienen los lunes el ministro de la Segpres, Cristián Monckeberg, con los jefes de bancada de Chile Vamos Sebastián Torrealba (RN), María José Hoffmann (UDI) y Luciano Cruz-Coke (Evópoli), al abordar el proyecto de ley del gobierno para efectuar un segundo retiro anticipado del 10% de los fondos de AFP.
La semana pasada, el Ejecutivo había sorteado con éxito en el Senado -logró alinear a sus cinco parlamentarios díscolos- para rechazar la reforma constitucional impulsada por la oposición, pero aprobando la iniciativa que entonces La Moneda había decidido apostar.
La concesiones que hizo el Ejecutivo fueron varias, como dejar atrás el reintegro de dineros, que era una de las principales críticas de los senadores oficialistas quienes, acusaron, en un principio, “letra chica” del proyecto del gobierno que, agregaban, era un “autopréstamo”.
Sin embargo, Chile Vamos se vio unido en la Cámara Alta como no lo había hecho nunca en esta materia, que, por lo demás, le propinó al gobierno y a su coalición su crisis más dura en julio pasado, en la discusión del primer retiro.
El panorama en este tercer trámite constitucional está siendo distinto. En el gobierno dicen estar “esperanzados” de que puedan sobrellevar con éxito nuevamente este proceso legislativo, no obstante, la negociación con los diputados del oficialismo ha sido más compleja que con los cinco senadores díscolos. Y así, en todo caso, ya lo avizoraban desde la semana pasada.
Por eso, la pregunta que hizo un dirigente en esa reunión del lunes en Palacio era totalmente atingente al debate que se ha dado durante estos días.
Por un lado, los que siempre han votado en contra de esta política pública -como en el primer retiro del 10%- reclaman en privado que el gobierno no puede venir a pedirles apoyo en la Sala. ¿Por qué? Agregan que ya han sufrido los costos de estar en contra de una iniciativa altamente popular. “No pueden hablarnos ni siquiera de principios esta vez”, recalcan en ese grupo de Chile Vamos al recordar que el gobierno cedió finalmente en hacerse parte de un debate que consideraban nefasto para el futuro del país.
En la otra vereda están los diputados oficialistas que han votado a favor de la iniciativa desde que comenzó a impulsarse en la Cámara -48 de ellos respaldaron la reforma constitucional opositora discutida hace dos semanas- y que, reclaman, en su mayoría, no debe haber impuestos; piden que el gobierno haga un “esfuerzo”. Justamente la exención tributaria ha sido uno de los nudos de la negociación y el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, ha sido firme en esa materia: ha dicho que no puede haber un nuevo “perdonazo” tributario.
El nudo de los tributos y los principios
La apuesta del gobierno, en tanto, es sobrellevar con rapidez este trámite constitucional y, en paralelo, pese a no pedir explícitamente los votos favorables de sus diputados, al menos salir públicamente acordando una indicación con su bloque en torno a los impuestos.
La rapidez se debe a la presión que se ha expuesto de que estos dineros estén disponibles para los ciudadanos previo a la navidad. Eso sí, este martes, Monckeberg ya puso paños fríos y dijo en televisión que era complejo que estuviera para navidad. “El plazo de navidad puede ser un poco difícil”, señaló en TVN.
La puesta en escena, dicen en Chile Vamos, debiese ser que, pocas horas antes de la votación en Sala -planificada hasta ahora para el jueves-, salgan unidos acordando un tramo “razonable” para cobrar impuestos. Por ejemplo, en el oficialismo ven probable que finalmente se termine cediendo que éstos empiecen a correr desde 1.5 millones de pesos de ganancia mensual. La propuesta actual del gobierno incluye impuestos desde los 700 mil pesos.
En los partidos de Chile Vamos -en sus respectivas bancadas- el tema tributario fue abordado este martes en el Congreso en Valparaíso.
En la UDI, la diputada Hoffmann bregó para que hubiese unanimidad en el grupo en que la postura sería apoyar la medida sin impuestos. Quienes estuvieron presente en esa cita, sostienen que el debate se centró en que es “contraintuitivo” cobrar impuestos a personas que, por lo general, no han recibido ninguna ayuda del Estado en medio de la pandemia.
Sin embargo, no se logró la unanimidad en la reunión, pues dos diputados sostuvieron que se debía cobrar impuestos al menos desde el primer tramo.
En RN, en tanto, en su respectiva reunión de bancada, la mayoría estuvo de acuerdo en que el impuesto debía ser aplicado para salarios superiores a 2.5 millones. La minoría -de hecho, dicen, solo un diputado- manifestó en la cita que estaba de acuerdo con que no se cobraran tributos.
“Mañana (miércoles) le vamos a pedir al gobierno que flexibilice su postura respecto a la inamovilidad de los tramos impositivos y que avancemos ojalá en dos tramas o, en el peor de los casos, un tramo sería hoy mucho mejor que nada, pues abordaríamos el 91% de los potenciales beneficiados. En esto quiero ser súper claro: la gente nos llama, nos escribe y nos dice ‘sabe qué, quiero pagar impuestos, pero quiero este proyecto rápido, porque necesito el dinero’. Le vamos a pedir al gobierno que sea ágil y facilitador posible para que los dineros lleguen antes de navidad”, dice a T13.CL el diputado RN Francisco Eguiguren, miembro de la comisión de Trabajo.
Evópoli, en tanto, desde el primer retiro de fondos, ha votado alineado. Solo Sebastián Álvarez se abstuvo en julio pasado y luego diputados como Cruz-Coke, Pablo Kast, Francisco Undurraga y Andrés Molina han rechazado la iniciativa.
Cruz-Coke, por ejemplo, ya notificó al gobierno que volvería a votar en contra porque, independiente de los tributos, no estaría de acuerdo, en general, con la política pública. El mismo argumento habría manifestado ya la diputada UDI Hoffmann, también jefa de bancada. Undurraga, por su parte, ha dicho públicamente que votará en contra.
Su votación en contra del proyecto del gobierno, relevan en Evópoli, no significa, en ningún caso, quitarle apoyo al ministro Briones, quien milita en su partido político. Es una cuestión de principios, dicen, y destacan que Briones tiene “todo el respaldo” de su colectividad, pues entienden que el secretario de Estado debe jugar el rol que le corresponde en la encrucijada que vive el gobierno.
Jugada a largo plazo
Este miércoles, a primera hora, está fijada una reunión de parlamentarios oficialistas -jefes de bancada- con los ministros Briones y Monckeberg. El objetivo, dicen, es lograr terminar de sellar el nudo de los impuestos primero con su coalición y luego con los diputados opositores.
Por eso, dicen, se explica que este martes el gobierno haya retrasado la votación en la comisión de Trabajo sobre artículos clave. Están ganando tiempo para buscar acuerdos con su coalición, explican.
Este martes, el gobierno también repuso la reintegración, lo que se había rechazado en el Senado. ¿La razón? Señalan que deben mantener la línea argumentativa de su proyecto original, sobre todo considerando que la reforma constitucional del segundo 10% está en trámite en el Tribunal Constitucional tras un requerimiento ingresado por el Presidente Sebastán Piñera.
En el oficialismo recalcan que aquí hay una jugada a largo plazo: que el gobierno debe cuidar el dinero fiscal de 2021, un año eleccionario; que La Moneda -en este caso Briones- debe evitar a toda costa que los artículos transitorios sean, en los próximos meses, el modus operandi de la izquierda para ganar popularidad y así ganar varios de los comicios que enfrentarán. Monckeberg, por su parte, debe intentar mantener a la coalición unida, dentro de lo posible y la respectiva libertad de acción que tienen los diputados.
La apuesta es arriesgada, reconocen en Chile Vamos, no obstante, deben defender lo que queda: cumplir con esta Constitución, es decir, que se respete la iniciativa exclusiva del Ejecutivo para presentar iniciativas que impliquen gasto fiscal. Evitar que se legisle a través de una “Constitución paralela”.
¿Y la oposición? “Nietit@s: Tendrán SegundoRetiro en Navidad, al -primera cuota, y con impuesto solo para tramos + altos. Es lo q pude conseguir. Diputados y Desgobierno compiten para tener protagonismo y salir en tv atribuyéndose, aunque saben q ya está zanjado. Intento ahora apurar la votación (sic)”, escribió este martes en su cuenta de Twitter la diputada del PH Pamela Jiles, quien impulsó la reforma constitucional opositora.
Ese mensaje, dicen en Chile Vamos, fue reflejo de que el gobierno está alcanzando acuerdo con la oposición. Además, recalcan, el Ejecutivo vio con buenos ojos la votación de este martes en la Cámara respecto a la censura de la mesa de la corporación que lidera el RN Diego Paulsen. La oposición desaprovechó la opción que tenía de manejar la mesa de la Cámara.
Por ahora, el gobierno debe continuar la negociación con Chile Vamos de un proyecto de ley que, hasta el cierre de esta edición, arriesga contar con varios votos en contra de su propia coalición.