El Consejo Superior de la Pontificia Universidad Católica (PUC) decidió que este plantel se sumará a la gratuidad de la Educación Superior en 2016, a pesar de que la medida le acarree un déficit de $ 1.600 millones.
En entrevista con La Tercera, el rector Ignacio Sánchez dijo que se han sumado a esta medida con el fin de entregarle el beneficio a los estudiantes que han elegido la universidad y que no puedan costear ese gasto, pero también porque considera necesario seguir trabajando dentro del futuro sistema para seguir "criticando, aportando, dando ideas" y no quedar como espectadores.
El rector aseguró que tanto la ministra de Educación como su par de Hacienda han podido comprender que han accedido, a pesar de estar poniendo fondos, por un bien superior, "porque pensamos que por un año es un esfuerzo que está haciendo la institución para poder acceder a la política y que hubiera sido dañino para nuestras políticas de inclusión decir no. Estamos poniendo recursos y eso es innegable".
Según Sánchez, la PUC va "a apoyar por dentro económicamente la implantación de esta gratuidad", entendiendo "la restricción presupuestaria con que está el gobierno para 2016". "Pero queremos que el tema de la brecha interna que afecta a un número importante de las instituciones esté en la discusión del futuro debate presupuestario para la reforma", agregó.
El rector aclara que la institución cambió de parecer desde su postura inicial, pues se tomó en cuenta que se avanzó en "temas de autonomía, de crecimiento y de respeto al desarrollo". De lo contrario, se habrían visto en la alternativa de seguir con becas y créditos, y evaluar cómo entregar la gratuidad.
"En el caso nuestro tiene que ver con el convencimiento de que nosotros apoyamos la gratuidad para los estudiantes que lo requieran. Esto no es un apoyo a la gratuidad universal. Mayoritariamente la Universidad Católica no está de acuerdo con la gratuidad universal. Porque pensamos que es regresiva, que no focaliza los recursos donde tiene que ponerlos. Pensamos que antes de la gratuidad universal el financiamiento de la educación debe focalizar los recursos en los grupos que más lo necesitan, es decir el 50%, 60% más vulnerable. Ir creciendo en ese sentido es lo más apropiado, no llegar a una gratuidad para todos", aseguró el Rector.