Parlamentarios oficialistas criticaron la solicitud de 27 presos que cumplen condena en la cárcel de Punta Peuco para liberar a condenados que, al momento de los crímenes de lesa humanidad durante la dictadura, pertenecían a eslabones bajos del mando militar.
Si bien, el diputado del Partido Socialista (PS) Jaime Naranjo consideró “un avance” que los condenamos reconocieran que cometieron violaciones a los derechos humanos, porque nunca antes lo habían hecho, pidió que entregaran información sobre los detenidos desaparecidos.
"Nuestras acciones produjeron violaciones a los DD.HH.": Qué dice la carta de presos de Punta Peuco
"Ojalá las fuerzas de derecha, que han negado la violación a los derechos humanos que ocurrieron en nuestro país, ahora que son los propios violadores de los derechos humanos quienes las reconocen, no tengan más argumentos para decir que en nuestro país no hubo una violación sistemática de los derechos humanos", dijo Naranjo.
“Me parece un poco tardía esta declaración porque siempre, y esperamos que sea la segunda etapa de una próxima declaración, para ser verdadera y sincera, es que nos digan dónde están los detenidos desaparecidos. A ellos siempre se les solicitó información y se negaron una y otra vez a entregarla, y en esta carta vuelven a hacer lo mismo, no entregan ninguna información que pueda dar con el paradero de los detenidos desaparecidos”, añadió.
Los firmantes del documento se centran en la responsabilidad de los altos mandos en los crímenes contra la humanidad cometidos durante la dictadura cívico-militar, y emplaza a quienes fueron sus superiores a asumir su propia culpa.
“Reconocemos que, en el cumplimiento de nuestros deberes y en la forma como lo entendíamos en esa época, muchas de nuestras acciones produjeron violaciones a los derechos humanos, con graves consecuencias. A no dudar, ello fue relegó de una formación que daba más importancia a la obediencia que al respeto por el que se consideraba adversario, lo que se cita como dato para su comprensión y no como justificación”, explica.
“Hemos esperado 33 años para que nuestros superiores asuman la responsabilidad de sus órdenes, las que hoy tienen tras las rejas a nuestros fieles subalternos. A partir de ello, venimos hoy a asumir la responsabilidad de sus actos, como consecuencia del pávido silencio de aquellos que, investidos de sus grados y cargos, no han tenido la grandeza de hacerse cargo de las órdenes que impartieron a sus subordinados”, añade.
El también diputado PS Leonardo Soto consideró que en la carta “no hay ningún arrepentimiento”, y pidió que sean los mismos presos de Punta Peuco quienes digan quiénes eran los que dictaban las órdenes.
“Esta carta refleja la idea de blanquear su responsabilidad. Si bien ellos reconocen que fueron parte de la comisión de delitos contra los derechos humanos, dicen que eran el eslabón más pequeño de la cadena de mando, sin embargo, si uno lee la carta, no tiene una gota de arrepentimiento”, aseguró Soto.
“No tiene una línea de compasión con las miles de víctimas de la dictadura, no empatizan con ellos, son muy insensibles al daño que se causó por ellos, no hay ningún arrepentimiento. Ellos saben quiénes dieron las órdenes, sin embargo, los protegen. En la carta no hay ninguna línea que dice que ellos van a colaborar con el paradero de los detenidos desaparecidos”, agregó.
La diputada de Convergencia Social (CS) Lorena Fríes descartó que ellos estén de acuerdo con algún tipo de beneficio para los condenados por crímenes de lesa humanidad en Punta Peuco, un día después que se conmemoraron 50 años del golpe de Estado.
“Frente a crímenes de lesa humanidad lo que corresponde es investigar y sancionar proporcionalmente al daño, por lo tanto no cabrían beneficios para ellos en la medida que no cumplan las penas, peor aun cuando no han cooperado con la justicia, no han entregado antecedentes, por ejemplo, que pudieran facilitar el plan de búsqueda y no se han arrepentido nunca de su accionar, entonces la verdad es que estamos ante un intento de nuevo de sensación de impunidad", planteó.
"Efectivamente los altos mandos dan órdenes y los que están más abajo ejecutan, eso no quiere decir que ellos sean inocentes, aquí hay autores de la planificación de una política que eran los altos mandos y que lamentablemente como Pinochet salieron sin polvo y paja y luego están los mandos más medios y más abajo que son los que ejecutaron órdenes y que están pagando por la ejecución de esas órdenes", complementó.