"Mientras no aclaremos bien el tema de las formas esto puede seguir porque hay otros temas en que tenemos diferencias. ¿Y le vamos a dar el trato que se nos ha dado? Así esto no tendría futuro", señaló este martes en entrevista con La Segunda el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier.
Como pocas veces desde que estalló la crisis en el oficialismo -a raíz de una declaración de la Nueva Mayoría condenando el rechazo en bloque de los diputados PC al reajuste en el sector público-, que el timonel comunista tomaba distancia de su postura de proyectar la continuidad de la Nueva Mayoría.
Su duro discurso fue aparejado de otras señales de distancia con el bloque.
Según fuentes del comité político, el lunes pasado, el diputado había intentando acordar una suerte de reconocimiento público por parte de su pares de que había habido un error al condenar la decisión “corporativa” del PC de votar “contra su propio gobierno”. Sin embargo, no encontró piso en los otros timoneles de la Nueva Mayoría.
Horas después, la timonel de la DC, Carolina Goic, lo acusó por Twitter de “tergiversar” la conversación entre los presidentes de partido -por señalar que había recibido “explicaciones” de sus pares. "Resulta que ahora tergiverso conversaciones. Estaría bueno que la corten", respondió también por la misma plataforma el diputado comunista.
Minutos después, La Moneda suspendió un comité político que se realizaría esa noche y Teillier, por su parte, echó pie atrás en su plan de convocar a la comisión política del partido.
Las aguas estaban demasiado agitadas en ese momento, dicen en el PC. En las filas del partido reconocen que Teillier no tiene margen para una postura más blanda frente a sus socios de conglomerado, considerando el duro debate que marcó el comité central comunista -una de las principales instancias internas- realizado el sábado previo.
Incómodos en el oficialismo
Ese día, los casi 80 miembros que integran la instancia recibieron dos documentos.
El primero, un análisis de los resultados de la última elección municipal, donde el PC perdió dos alcaldías, entre ellas el bastión de Pedro Aguirre Cerda, bajó también en el número de concejales y perdieron cerca de cien mil votos.
El texto, según quienes lo conocieron, calificaba como un error por parte del partido el pacto con el PPD, que derivó finalmente – de acuerdo a dicha evaluación- en una merma electoral.
En los días previos, Teillier había relativizado la tesis de que el PC pagaba costos electorales por estar en el gobierno. El sábado, tras el comité central, sin embargo, señaló que “es posible que haya influido, los costos coyunturales nos preocupan”.
El segundo documento era un informe político en que se explicaba en detalle la versión de la directiva en torno a la declaración de la Nueva Mayoría contra el PC por el reajuste al sector público. Aparte del texto, hubo ante el pleno del comité central una explicación verbal del propio Teillier.
Bajo ese contexto, dicen quienes conocieron de la reunión, una parte mayoritaria de los integrantes planteó derechamente su incomodidad con su permanencia en la Nueva Mayoría y muchos señalaron no estar a gusto en la coalición gobernante.
Con la misma claridad, sin embargo, se determinó que el partido se mantendrá en el conglomerado sólo por "lealtad" con la Presidenta Michelle Bachelet, y para "honrar" los compromisos del partido.
Así, mantenerse en el mismo bloque político tras la administración Bachelet no está para nada asegurado.
De acuerdo a algunos de los consultados, en el pleno se percibió también un malestar bastante generalizado hacia la candidatura del ex Presidente Ricardo Lagos, quien fue duramente criticado por algunos de los integrantes del pleno.
Una eventual candidatura de Lagos, o un triunfo de éste en la primaria de la Nueva Mayoría, sumado al término de la administración bacheletista, serían factores clave que podrían gatillar un alejamiento o al menos, un cambio en la relación entre el PC y sus hasta ahora socios políticos.
