Sólo minutos después de que Hillary Clinton reconociera su derrota, Barack Obama, el presidente de los Estados Unidos, realizó su primer discurso tras la victoria de Donald Trump.
En su intervención desde la Casa Blanca, Obama dijo que "no es secreto que tengo diferencias significativas" con Trump, pero ofreció toda su colaboración para el traspaso del poder.
En esa línea recordó que la transición de gobierno por parte del ex Presidente George Bush, hace ocho años, "no pudo ser más profesional para que pudiéramos instalarnos en la Casa Blanca".
"He instruido a mi equipo a que siga el ejemplo y trabajaremos para que sea una transición exitosa", añadió.
Además, el presidente de los Estados Unidos contó que anoche conversó con la candidata demócrata Hillary Clinton y señaló que "no podría estar más orgulloso de ella, ha llevado una vida extraordinaria de servicio público".
"Muchos americanos la admiran, su candidatura y su nominación fueron históricas y dejan un mensaje en toda la nación", aseguró sobre su ex secretaria de Estado.