¿Cuál es la postura de Bolivia en la demanda por el Río Silala?
Este viernes 1 de abril comienzan los alegatos de Chile ante la Corte Internacional de Justicia por la demanda contra Bolivia por el uso de las aguas del Río Silala.
Durante dos semanas, ambas partes darán a conocer sus defensas ante el tribunal de La Haya, buscando ganar el caso.
Río Silala: ¿Cuándo y cómo serán los alegatos de Chile y Bolivia ante La Haya?
¿Cuál es la postura boliviana en el tema y qué es lo que buscan ante la corte? En T13.cl te lo contamos.
Un siglo de historia
La postura chilena apunta a que durante los últimos 100 años Bolivia reconoció el carácter internacional del río y que luego la cambió.
De acuerdo al equipo chileno, esto quedó evidenciado en el mapa del Tratado de Paz y Amistad de 1904, donde Chile y Bolivia establecieron su límite internacional definitivo.
En el marco de dicho tratado, ambos países aprobaron un mapa que da cuenta del trazado del límite internacional.
En dicho mapa aparece representado el “Río Silala” cruzando el límite entre Bolivia y Chile, entre el punto 15, ubicado en el Cerro Silala, y el punto 16, localizado en el cerro Inacaliri.
Del mismo modo, desde Chile se sostiene que en 1999, Bolivia cambió oficialmente de postura sin mayor fundamento. Esto, luego de asegurar que el Silala era una vertiente cuyas aguas están ubicadas exclusivamente en territorio boliviano y que eran artificialmente desviadas hacia Chile.
Anuncio de la demanda
Luego de estas diferencias, en 2004, Bolivia y Chile crearon un grupo de trabajo por el Silala. Dos años después se incluyó el tema en la agenda bilateral.
Chile estuvo dispuesto a continuar ese diálogo, pero en 2010 Bolivia planteó el pago de una compensación por el uso “histórico” que ha realizado Chile e insistió en que era propietaria del 100% del mismo.
El 23 de marzo del 2016, durante su discurso por el “Día del Mar”, el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció el “estudio” de una demanda en contra de Chile por el uso de las aguas del río Silala.
Dicha demanda fue oficialmente anunciada tres días después de sus dichos, el 26 de marzo del 2016.
Frente a estos hechos, Chile resolvió acudir a la Corte internacional de Justicia y presentó su propia demanda el 6 de junio de 2016, dando inicio al caso.